lunes, 21 de septiembre de 2009

MR73


El detective Louis Schneider (Daniel Auteuil) está pasando una mala época, bebe demasiado, los recuerdos le atormentan, ha sido degradado y casi no le quedan amigos. Además debe enfrentarse a un escurridizo asesino en serie y a otro que atrapó hace 25 años y está a punto de salir en libertad.

Me gustan las películas con antihéroes. Me suelen resultar gratificantes y hasta cierto punto las prefiero frente aquellas en las que el protagonista es un tipo inmaculado y perfecto. Prefiero ver que el protagonista es humano y que tiene las mismas debilidades que cualquiera de nosotros, a veces incluso más.

Daniel Auteuil (Cache, La reina Margot) compone un personaje realmente complejo que va cavando su tumba mientras intenta resolver un misterio que le supera. En condiciones normales el caso sería ya de por sí difícil, pero en su lamentable estado actual adquiere dimensiones trágicas. Agobiado por una situación personal y profesional realmente dura el personaje intentará salir a flote y redimirse atrapando a un asesino. Pero un entorno hostil, lleno de policías corruptos y burócratas no se lo pondrán nada fácil. Sólo una joven superviviente al asesinato de sus padres hace 25 años confiará en él.

Basada en un hecho real, el film de Oliver Marchal funciona casi a la perfección dentro de las directrices del género policíaco. Yo pasé un buen rato, las pelis europeas de policías no suelen entretenerme tanto como ésta. La oscuridad y la sordidez de la trama me atraparon desde la primera escena en el autobús. Las referencias a Dios, la culpa y la redención me parecieron muy acertadas. Mientras el policía va renegando cada vez más de Dios, el asesino preso usa su supuesto acercamiento a Dios para salir de la cárcel. La misma idea sirve para fines muy distintos. Por otro lado, los personajes están bastante bien dibujados, muchas cosas no se cuentan explícitamente, se insinúan con miradas o gestos.

Me gustó la fotografía del film, muy oscura pero nada artificiosa, casi siempre es de noche o está lloviendo, a pesar de lo cual el prota siempre lleva gafas de sol.

Es una pena que hacia el final la peli pierda algo de fuelle y se haga algo confusa. En el epílogo de film asistimos a demasiados hechos en poco tiempo cuando ya el espectador ha perdido casi el interés.
Quizás un montaje algo más compensado hubiera hecho a la peli más llevadera.
Al igual que pasó con Memories of murder, con esta peli queda patente que se pueden hacer thrillers mejores que los de Hollywood y con mucho menos dinero.




6,5


2 comentarios:

Crowley dijo...

No la he visto pero ya son varias las críticas que me están animando a hacerlo cuanto antes.
Saludos

Mister Lombreeze dijo...

Muy recomendable. A mí me encantó y es notable ese acercamiento-alejamiento de Dios que mencionas. Es verdad que se precipita algo al final, pero yo creo que se merece más nota. Daniel Auteuil está fabuloso. Yo creo que es una de las mejores pelis del año.
Si no has visto las pelis anteriores de Marhal, te las recomiendo.