martes, 17 de enero de 2012

Alien, El octavo pasajero (Alien, 1979)



"En el espacio nadie puede oír tus gritos" con esta mítica frase se publicitaba este film de Ridley Scott en su estreno allá por 1979.  Alien era la segunda película de Scott, tras la estupenda Los duelistas. Tras ver Star Wars, Scott decidió que la ciencia ficción espacial no era un género del pasado.

Alien nos sitúa dentro de una nave de carga, La Nostromo, cuyos 7 tripulantes están hibernando durante el largo viaje de regreso a la tierra. La Nostromo porta minerales extraídos de lejanas colonias en el espacio, tanto la nave como la carga son propiedad de la compañía (cuyo nombre no se cita en el film pero sí aparece su logo y así sabemos su nombre: Weyland-Yutani). La hibernación de los tripulantes es interrumpida antes de tiempo ya que se recibe a bordo una señal de socorro proveniente de un planeta no habitado, LV-426. El ordenador de a bordo, llamado Madre (quien guarda bastantes similitudes con HAL9000 de 2001) decide despertar a la tripulación. Según las normas de la compañía, no se puede negar la asistencia ante una transmisión de socorro, por lo que una expedición formada por el capitán Dallas (Tom Skerrit), Kane (John Hurt) y Lambert (Veronica Cartwright) va en busca de la fuente de la emisión.


Mientras tanto, la teniente Ripley  (Sigourney Weaver) se queda al mando accediendo al cuarto de comunicaciones de Madre. Ripley opina que la transmisión recibida no es de auxilio sino de advertencia. Informa de ello al oficial científico, Ash (Ian Holm), quien no parece darle importancia, ya es muy tarde para  hacer volver a la expedición. El origen de la señal parece estar en una nave alienígena que parece llevar mucho tiempo varada en el planeta. El interior de la nave es espectacular, de formas orgánicas que recuerdan más a un ser vivo que a una nave espacial. Allí los tres tripulantes se encuentran con el cuerpo fosilizado de un extraterrestre aferrado a una especie de cañón (el llamado space jockey). Parece como si de su pecho hubiera salido algo que lo mató. Pero no será el último descubrimiento de los tripulantes ni el más terrible. Cerca descubren unos huevos que esconden en su interior una desagradable sorpresa.


Alien es realmente un film de suspense y terror ambientado en una nave espacial. Tiene más en común con Naves misteriosas que con Star wars. Aunque su atmósfera fría y su ritmo emparentan con el cine de los años 70, con quien más similitudes guarda es con el film de ciencia ficción de 1951 El enigma de otro mundo. En ambas películas un grupo de humanos se encuentra con un alienígena hostil en un medio no menos peligroso. En la primera es el polo norte, en la otra es el espacio. También en ambas hay un científico que se siente fascinado por el alienígena y pretende aprender de él. Incluso el diálogo de Ash con Ripley se parece bastante al del científico del film de 1951. En ambos se hace referencia a la falta de sentimientos del alienígena, quien no ve entorpecida su capacidad de matar por sentimientos de ningún tipo.


El guión de Dan O'Bannon ofrece un certero retrato de cada uno de los 7 tripulantes de la Nostromo, todos quedan perfectamente definidos al inicio del film. Un complejo retrato de personajes y sus motivaciones que no suele ser habitual en este tipo de cine. Incluso quedan perfectamente definidos los dos ingenieros encargados del mantenimiento de la nave: Parker (Yaphet Kotto) y Brett (Harry Dean Stanton) ambos vienen a ser la clase obrera que se siente explotada y no pierden oportunidad de pedir una mejora en sus condiciones laborales o un aumento de su paga. Un detalle que los humaniza y acerca bastante al espectador medio. Incluso vemos cómo Parker domina claramente a Brett debido a la debilidad de carácter de este último.


Alien nos regaló a una de las pocas heroínas de la ciencia ficción: la teniente Ellen Ripley. Ripley  al principio parece ser un miembro más de la tripulación y no destaca especialmente, incluso tarda bastante en tomar el protagonismo del film. Su protagonismo se hace por eliminación, conforme van quedando menos personajes, Ripley se erige en la única capaz de hacer frente al monstruo. En el montaje original Ripley tenía más escenas al principio del film: mantenía una relación sentimental con Dallas e incluso se peleaba con Lambert. Para terminar con los personajes, debemos mencionar por último a Jonesy, el gato, quien nos proporciona algún que otro susto muy imitado en el cine de terror posterior.

Hay que destacar los espectaculares diseños de H.R. Giger, tanto la nave extraterrestre como el Alien son unos hallazgos que marcaron época e influyeron decisivamente en la ciencia ficción posterior. Giger había sido reclutado para el cine por Jodorowsky y su frustrado proyecto de adaptar Dune, parte de aquellas ideas se acabaron plasmando en Alien. Los extraterrestres ya no eran pequeños seres cabezones de apariencia inofensiva, eran seres letales con un sistema defensa casi infalible. También las naves y el planeta diseñados por Giger tenían formas orgánicas, eran casi seres vivos con formas sinuosas. Pero los diseños de Giger y las secreciones viscosas del monstruo no eran suficientes para crear un icono del cine de terror.

 El ingrediente que faltaba era la tensa atmósfera que Ridley Scott supo crear. Una atmósfera que se va tornando cada vez más asfixiante hasta llegar a un clímax difícilmente superable, aunque muchas veces imitado. La dirección de Scott es simplemente perfecta. Scott logró crear un monstruo casi a la altura de los monstruos clásicos de la universal a base de mostrarlo muy poco. Su alien es tan aterrador como el tiburón de Spielberg y en ambas películas la forma de mostrar al monstruo es fundamental a la hora de crear la sensación de miedo en el espectador. El alien de Scott era un estudiante nigeriano de más de 2 metros llamado Bolaji Badejo dentro de un traje. Para evitar que no se notara que había un hombre debajo del traje, Scott decidió mostrar al monstruo muy brevemente, siempre en penumbra y nunca de cuerpo entero. Algunas escenas fueron eliminadas del montaje final debido a que se notaba demasiado que había un hombre dentro del traje. Así Scott lograba crear una mayor sensación de miedo en el espectador, siempre se teme más a lo que no se ve. Los efectos especiales y las babas viscosas hicieron el resto.

 Alien es una gran película, ya sé que no os descubro nada, vista más de 30 años después de su estreno se mantiene claustrofóbica y terrorífica como el primer día.  Es cierto que ciertos aspectos han envejecido un poco mal, la tecnología no se ha desarrollado de igual manera y las pantallas de ordenador nos parecen rudimentarias, pero en 1979 no podían ni imaginar nuestras pantallas LED actuales.

El film tiene varias escenas míticas, como la llegada a la nave extraterrestre, la cena en la que el alien sale del pecho de Kane, la revelación de la naturaleza de Ash o todo el tramo final del film: esas sirenas sonando, ese vapor y esas luces estroboscópicas son de un efecto aterrador que nunca se había visto antes en una película. Especialmente aterradora me parece también la imagen del monstruo sonriendo mientras observa al gato encerrado en la jaula. La precisa dirección de Scott redefinió el género de la ciencia ficción y el terror con esta obra maestra.

Como decía Ed Chigliak en Doctor en Alaska: "Da igual lo mucho que te hablen de Alien. Cuando la ves, es mucho mejor de lo que te habían contado."

7 comentarios:

Manderly dijo...

Todo un clásico del género! Quizás la primera que ha sido bien aceptada por crítica y público. Siempre me ha gustado Sigouney Weaver y este es uno de su mejores personajes, como dices una d elas primeras heroínas que a día de hoy se mantiene. No puedo olvidar ese final! Me encanta!
Saludos.

Anónimo dijo...

grande, obra maestra absoluta del cine de terror, queremos artñiculos sobre el resto de la cuatrilogía. lo de aliens contra predators te lo puedes ahorrar.

Kinezoe dijo...

Muy buena entrada, Luis. Me encanta "Alien" y disfruté mucho leyéndote. Parece que Ridley Scott encadenó los mejores títulos al comienzo de su carrera.

La de "Prometheus", por el tráiler, no es que se le parezca mucho a ésta, pero démosle un voto de confianza...

Saludos.

Möbius el Crononauta dijo...

Terror y ciencia ficción unidas como nunca nadie lo podrá hacer. Alien lo tiene todo, ya le dediqué un post en su día pero últimamente tengo ganas de volver a hablar de ella.

Sencillamente perfecta, alucinante, aterrodara, y muchos adjetivos más. Y dios bendiga al maldito Giger.

saludos

ÁNGEL dijo...

Una de mis favoritas. Confirmo esas palabras de Ed Chigliak que rematan este nutritivo post. De vez en cuando me dejo caer por ella.
Salus.

Manuel Márquez dijo...

Muy buena reseña, compa Luis: ilustrativa y sintética, sí, señor… No soy yo muy amante de este género, el del terror fantacientífico, pero tengo claro que una peli como ésta trasciende cualquier adscripción genérica (y eso sin contar con su potencial icónico y su conversión en pieza de culto, que serían otras consideraciones a tener en cuenta). De las secuelas, como no he visto ninguna, no puedo opinar (no sé hasta qué punto habrán degenerado respecto al ‘producto original’…).

Un abrazo y hasta pronto.

Félix S. Trabanco dijo...

Una obra maestra del género ciencia ficción y del cine en general. No me es posible sacarle el más mínimo defecto. Está a la altura del Star Wars original, con la diferencia de que odio la segunda trilogia de George Lucas, pero me gustan todas las pelis de Alien, con la excepción de Aliens Vs Predators, que no la he visto, pero que prefiero obviar. Me parece increible que la haya dirigido Ridley Scott, al menos viendo lo que hizo tras Blade Runner. Le doy un pequeño voto de confianza a Prometeus.