lunes, 24 de enero de 2011

El discurso del rey (The king's speech)



El discurso del rey es un ejemplo de ese buen cine británico que tanto gusta en Hollywood. Es un buen film, con un buen guión, muy bien interpretado y con un ritmo que no decae en ningún momento. Además trata el tema de la realeza, que siempre queda muy cool. El discurso del rey es un buen film, pero no es un gran film.




El film se centra en la historia del rey Jorge VI y sus intentos por superar su tartamudez así como la relación que se establece con un peculiar experto en dificultades del habla. El invento y proliferación de los aparatos audiovisuales a principios del siglo XX provocó un enorme cambio en la forma en la que la realeza se presentaba ante sus súbditos. Los reyes dejaron de ser casi unos desconocidos, el pueblo podía oír sus voces en los discursos gracias a los aparatos de radio y podía ver su imagen gracias a las fotografías impresas o los noticiarios. El mundo vivía una revolución sin precedentes, las noticias volaban y el mundo nunca sería igual. La imagen pública empezaba a ser algo muy importante, como bien dice un personaje, los reyes se convirtieron en actores. No sólo había que ser decente, había que aparentarlo. En este complejo momento es cuando el rey Jorge VI del Reino Unido accede al trono tras renunciar su hermano Eduardo VIII para casarse con Wallis Simpson (millonaria, norteamericana y casada previamente dos veces). La tartamudez y el miedo a hablar en público así como la inminente segunda guerra mundial marcarán el reinado del nuevo rey.

En un momento del film el nuevo rey observa una filmación de Hitler dando un discurso con su ya famosa forma de gesticular y controlar a las masas, el rey inglés no entiende lo que dice pero comprende que la oratoria es un arma infalible para ganarse al pueblo. Un rey incapaz de hablar en público no podrá nunca tener el respeto de su pueblo.

Tom Hooper maneja la historia de forma más que correcta, no innova ni busca alardes innecesarios. Se ciñe a la historia y la rueda de forma clásica, casi de libro, sin salirse un ápice. Nada de estridentes flasbacks ni experimentos en el montaje. La fotografía, la dirección artística, el vestuario o los decorados son impecables, simplemente perfectos. Nada que objetar, es lo que una historia así requiere. Quizás yo eché de menos un poco más de ironía o humor en el guión. Tanta perfección técnica se me hizo algo fría, demasiado clásica para mi gusto. La película entretiene pero tanta flema británica juega en su contra. Le falta algo de brío para acabar de atrapar al espectador, es como un bodegón: perfecto en su composición y ejecución pero falto de vida. A veces el todo es más que la suma de las partes y necesita de ese algo inexplicable que hace que la historia te llegue a conmover. Yo en este caso no he visto ese algo. Es algo totalmente subjetivo, lo sé.

Así pues, cabe señalar que en El discurso del rey hay escenas muy buenas, sobretodo los diálogos entre Colin Firth y Geoffrey Rush (excelentes ambos) e incluso se puede decir que Helena Bonham Carter está bien fuera de sus eternos papeles de excéntrica (buena falta le hacía). Yo me quedo con la emocionante escena final en la que el espectador puede sentir la enorme presión que recae sobre el inseguro rey.

Impecable técnicamente pero le falta vida.

6

8 comentarios:

Mario dijo...

He leído buenas críticas sobre la película, la tuya me ha sorprendido un poco al encontrarla fría en tus palabras, sin embargo Geoffrey Rush es un excelente actor de esos que no son tan populares pero académicamente son excepcionales, Firth me parece el mejor representante del cine inglés y posiblemente futuro premio Oscar, querer ver sus interpretaciones me genera atracción hacia la película, también sé que es de tono simple pero que han actuado con audacia, enfocándose en un solo tema bien desarrollado. Tendré que verla.

PD: Como escribí en otro artículo tuyo, el de Gervais, no sé si lo has visto, pero por si acaso, me he hecho seguidor de tu bitácora, si te animas sigues la mía, solo para compartir el placer por el cine de cinéfilo a cinéfilo. Un abrazo.

Mario.

ANRO dijo...

Aquí, en Gran Canaria, estamos esperando aun su estreno. Creo que esta peli, al igual que "The Queen", será un producto de calidad impecable. Me encanta ver a estos estupendos actores en retos difíciles. La pena será que se proyectará en versión doblada, en cuyo caso creo que prescindiré de verla en pantalla y esperaré a verla en el Plus, así podré gozar de ese cincuenta por ciento interpretativo que me iban a recortar.
Un abrazote.

El Guardián de la fila 8 dijo...

No podría estar más de acuerdo. A mí me dejó absolutamente frío. Es cierto que las interpretaciones de Rush y Firth son estupendas pero, a mí, el film no me atrapó en ningún momento e incluso me parecía irritante tanta preocupación por un discurso (quizás tenía yo el espíritu demasiado punk ese día), aunque debo confesar que los temas monárquicos siempre me acaban irritando.

Estupendo post.

Mis respetos,
El Guardián

Mister Lombreeze dijo...

Mañana te replico en el Mundo Gusano. A mí me ha gustado mucho, mucho.

Luis Cifer dijo...

Ok, ya sabes que para gustos lo colores. la verdad es que a mí me gustó el film, le doy un 7, pero no me acabó de convencer. No te puedo decir nada concreto, sólo que le falta algo de chispa a la historia (muy interesante y llena de posibles reflexiones) pero...

Alfie dijo...

A mi me gustó, es una historia que encandilará a los académicos, les encantan las historias de crecimiento perosnal, si es Rey más cool como tu dices. Este creo que es el año de Colin, cómo le iban a dar el Oscar por intepretar a un maricón, eos Hollywood no se lo peude permitir, pero a un Rey sí, hombre eso sí.

Luis Cifer dijo...

yo tengo la teoría que los de Hollywood premian a veces con un año de retraso, compensando que no acertaron el año anterior. Es una teoría.

Unknown dijo...

a mi me pareción que tenía demasiadas pretensiones. La historia está bien contada y ambientada, pero a mi se me hizo larga y pelin pesada.