viernes, 22 de noviembre de 2013

JFK, Caso abierto (1991)


Hoy se cumplen 50 años del asesinato del presidente John Fitzerald Kennedy en Dallas (Texas). 50 años de un misterio y múltiples teorías sobre la autoría del asesinato. Por mucho que se escriba y se investigue, parece que el asesinato de JFK va a quedar como uno de los mayores misterios sin resolver de la historia reciente.

En 1991 el controvertido cineasta Oliver Stone decidió abordar el tema con un film que no dejó indiferente a nadie. JFK, caso abierto es un film enorme en todos los sentidos. No sólo tiene una duración desmesurada sino que también es excesivo en muchas otras cosas. Stone no quería dejar pasar la oportunidad de, al menos, sembrar la duda sobre las conclusiones a las que llegó la comisión Warren que investigó el asesinato de Kennedy. Stone desarrolla aquí su mejor crítica al capitalismo encarnado en el sistema americano. Un sistema capaz de matar a cualquiera que vaya en contra de sus intereses, incluso al propio Presidente.

Puede que Lee Harvey Oswald actuara en solitario y todas las demás cavilaciones no tengan sentido. O puede que Oswald no pudiera realizar tres disparos en tan poco tiempo apostado en la ventana del sexto piso del depósito de libros de Texas. Puede que la trayectoria de las balas que se estableció en la versión oficial fuera totalmente imposible. ¿Quien sabe si todas las hipótesis contrarias a la versión oficial son fruto de inverosímiles teorías de la conspiración (a las que los norteamericanos son tan aficionados). Personalmente, no sé qué creer.


Pero, intentando ser objetivos, el film me parece una maravilla primeramente por la meticulosa y rabiosa dirección de un Oliver Stone en estado de gracia. Stone elaboró un guión sobresaliente lleno de aristas. Aunque no participes de las tesis de Stone, el film tiene un ritmo excelente y atrapa sin remedio (incluso a quien estos temas tan yanquis se la suden). Stone logró un magnífico tono semi-documental y unas pormenorizadas reconstrucciones de los hechos que sumergen al espectador en aquel fatídico 22 de Noviembre de 1963 en Dallas.

 He de destacar el revolucionario montaje en el que intercalaba planos muy cercanos de objetos o gestos de personas. Enfatizando así ciertas características relevantes no tanto para la narración, sino para visión del espectador del objeto o persona. Stone intenta condicionar (o manipular) al espectador, haciéndole partícipe de su propia visión. Para ello se sirve de cantidad de elementos subliminales tanto visuales como sonoros. Muchos de estos elementos pasan desapercibidos la primera vez ya que son apenas perceptibles, como calaveras reflejadas en relojes o peatones de curioso parecido con presidentes republicanos como Bush padre o Reagan. No olvidemos que Kennedy era del partido demócrata y a nadie debería sorprenderle que Stone no sienta ninguna simpatía por el partido republicano ni por el tea party
JFK es un film que gana en sucesivos visionados, buena parte de su valor reside en los detalles. Como si del asesinato de Kennedy se tratara, Stone va dejando pistas semi ocultas en su cinta de los posibles autores intelectuales o beneficiados con el asesinato de JFK. No olvidemos que Kennedy era del partido demócrata y a nadie debería sorprenderle que Stone no sienta ninguna simpatía por el partido republicano ni por el tea party.
Stone no se limita a contarte una historia, quiere convencerte de que todo el sistema político y económico está corrupto y hay unos culpables. No es un director al uso que solamente pretende entretener al espectador y que éste se vaya a su casa contento y feliz para seguir consumiendo. Stone ataca al sistema capitalista y crea el malestar y duda en el espectador, pretende hacerle ver que le han estado mintiendo y ocultando pruebas desde hacía casi 30 años (el film es de 1991). ¿En qué otras cosas nos habrán mentido? Lamentablemente, ciertos hechos de la historia reciente como las filtraciones del caso Snowden y Wikileaks parecen darle la razón a Stone.

 El film es además un complejo crisol que resume perfectamente cómo era el mundo en los 60 (guerra fría, Castro, bahía Cochinos, carrera espacial, Rusia, Corea, Vietnam, petróleo, casi casi como hoy.) Es un gran mapa para entender quien mueve los hilos en la política internacional, ayer, hoy y siempre.

 En cuanto al reparto, en mi opinión tiene la mejor interpretación de Kevin Costner (resulta creíble en ese personaje). Pero la palma se la lleva un reparto coral lleno de actores secundarios de lujo (Gary Oldman, Walter MathauJack Lemmon, Donald Sutherland, Tommy Lee Jones, Joe Pesci, Sissy Spaceck, etc), todos espléndidos.

 En definiva, Oliver Stone empezó la época más combativa e interesante de su carrera con este magnífico film. 

9 comentarios:

José Luis López Recio dijo...

Fui a verla al cine y pese a lo larga que es no9 me aburrí. Auqune de mis amigos fui el único al que le gustó de verdad.
Representaba un nuevo modo de hacer cine que como has indicado rozaba el documental.
Saludos

Crowley dijo...

Una gran película de Oliver Stone. Trepidante y muy interesante. Para disfrutarla de principio a fin. Lástima que Stone esté tan perdido (para mi) últimamente y se dedique más a otras cosas que a hacer cine de verdad.
Saludos

dvd dijo...

Pues muy de acuerdo; es de las pocas que de verdad me gustan de Stone, un tipo tan excesivo que a veces se le olvida que al otro lado de la pantalla hay gente...

Insanus dijo...

Lo más asombroso de esta película es la gran aceptación que tuvo a nivel de calle, de populacho. Todo el mundo la vió, pese a ser un tema tan duro, tan localizado y en un largo de 3 horas. En serio, es hasta cómico. Hasta el más garrulo de mis amigos la alquiló o fue al cine. Un extraño fenómeno.

Hasta otra.

Angel "Verbal" Kint dijo...

El mejor montaje que nunca he visto en una sala de cine

Félix S. Trabanco dijo...

Stone es un director que no suele rodar buenas películas, pero cuando acierta es realmente sorprendente. Me parece increíble que el mismo tío que hizo mediocridades como "Alejandro Magno" o "W" haya podido realizar films como "JFK" o "Nixon". En ese sentido me recuerda a James Cameron que hizo 2 grandes pelis hace años y a partir de ahí vacío completo. En fin, grandiosa película. Casi parece un ensayo político en forma de película, pero sin caer en la pedantería ni en el aburrimiento. Una de mis dilms favoritos de la historia.

Félix S. Trabanco dijo...

Bueno, pequeña rectificación: en el caso de James Cameron solo hizo una buena peli (en mi opinión): "Aliens". Compararlo con Stone es injusto por mi parte, porque Stone tiene un mayor número de buenas películas (y con más enjundia), aunque la mayoría de las que realizó no lo sean.

Anónimo dijo...

Leì toda la critica de este film por parte del autor de la nota y me sorprende el nivel de mediocridad del que hace gala. Es increíble por cierto que hayan personas que no les llame la atención este film y que sigan creyendo a pie juntillas que fue únicamente el "loquito" de LHO el que asesino por si solo a Kennedy con un rifle inservible y con disparos imposibles. En fin, si a las personas se les dice por parte del gobierno y de la tv que el cielo es cuadrado y violeta se lo creen a rajatabla y para colmo aparecen estúpidos actuando como científicos tratando de validar lo que dije anteriormente.(Para el autor de la nota: Si decís que ya no sabes en que creer para que carajo escribiste este análisis sobre la película, te recomiendo que veas el libro de Jim Garrison y otros libros especializados sobre el tema, informate mejor porque tipos como vos me tienen un poco cansado y harto).

Anónimo dijo...

oliver stone admirador del presidente donald j. trump