miércoles, 28 de agosto de 2013

Miley Cyrus y su bochornoso show en los VMA



Que no. Que a mí Miley Cyrus en plan animal en celo no me ha escandalizado. Probablemente se deba a que no me la creo como bomba sexual igual que nunca me creí a su alter ego Hannah Montana. Todo huele a calculado. Otra ex estrella de la factoría Disney fabricada en un laboratorio que intenta seguir en el candelabro pasada la pubertad. Como la chica tiene menos voz que un osito de peluche sodomizado por Nacho Vidal, ha optado por la vía de la provocación sexual. Allá ella.

Lo de su chabacana actuación en los risibles premios VMA (¿Video Music Awards?) ha sido la guinda del pastel. Mola lo de ir de rebelde y transgresora pero en el caso de esta chica se queda en la mera pose. No hay quien se la crea, ni como niña buena ni como pendón desorejado. Por mucho que se esfuerza en parecer una macarra enfundándose en ropas que sonrojarían a cualquier prostituta poligonera o sacando la lengua (cual pastillero en pleno apogeo), todo se me antoja impostado. Demasiado tiempo intentando hacernos creer que era una chica formal para ahora venirnos a contar que es un zorrón de pura cepa. Tampoco es que baile especialmente bien, yo no la contrataría ni como stripper en las fiestas de mi pueblo.


 Quizás sea el entorno, esa gala de la MTV tan falsa. ¿Cómo nos vamos a creer nada de una gala cuyo máximo galardonado fue Justin Timberlake? Entiendo que youtube ha hecho mucho daño a la MTV, ya no tiene el control absoluto sobre la emisión de clips y contenidos musicales. Ahora podemos ver en la red los vídeos que nos dé la gana y la MTV se ha visto obligada a hacer patéticos reality shows sobre jóvenes salidorros hasta las cejas de esteroides, mientras tanto los contenidos musicales casi han desaparecido y se limitan sólo al público adolescente. Ya no suena buena música en la MTV (hace años que no lo hace), ahora sólo hay productos prefabricados para adolescentes.  Antes yo pensaba que la M era de Music pero ahora veo que la M viene de otra palabra que acaba en "ierda". Hablemos claro, estos premios VMA de la MTV son directamente una basura.



Recuerdo cuando vimos con unos colegas la entrega de premios del año 1995 con premiados de calidad como Garbage, REM o U2 (recuerdo cómo Bono se mofó del premio a mejor grupo justo el año que no habían hecho disco ni gira). Eran otros tiempos, siempre hubo algo de mínima provocación a cargo de las petardas de Britney Spears y/o Madonna, pero había hueco para la música de calidad dentro de tanta comercialidad.

  Visto que todo vale para que hablen de una, si es mal, mejor que mejor. Complicado lo tiene la Cyrus si quiere hacerse un hueco en el terreno de la provocación sexual para mojigatos entre expertas provocadoras (o payasas) como Madonna, Rihanna o Lady Gaga. Una lástima que lo del vestido a base de filetes de carne ya esté inventado.


 Miley, en confianza, no nos creemos tus espectáculos en busca del escándalo.  Quizás levantes ampollas en tu puritana América pero a nosotros, que nos criamos amamantados por los catódicos pechos de Sabrina, tu impostada provocación sólo nos provoca risa.

martes, 27 de agosto de 2013

Pacific Rim


Tengo que reconocer que Guillermo del Toro me resulta un tipo entrañable y simpático. Es u auténtico friki que ha logrado su sueño de poder realizar las películas que a él le gustaría haber visto de niño.  Sus películas son siempre dignas e intentan aunar diversión con calidad aunque los resultados no siempre sean los esperados.  Ahora regresa con Pacific Rim, película a la que yo hubiera titulado Mazinger Z contra Godzilla.

Y ocurre que Pacific Rim no es más que una actualización de esos famosos personajes venidos de extremo oriente, ni más ni menos. Te pueden vender la moto como quieran pero no dejará de ser una moto. Pacific Rim peca inicialmente de poco original y de rendir excesivo tributo a esas viejas películas de serie B sobre monstruos destrozando ciudades. Su argumento resulta hoy día totalmente ridículo, vamos a ver: eso de crear robots enormes que se partan la cara de metal contra unos monstruos gigantes que salen de una grieta entre dimensiones (¿?) podía ser novedosos en los años 50 pero ahora resulta bastante trasnochado e inverosímil.  Con tanta empanada mental de dibujos japoneses yo me preguntaba cuando diablos iban a aparecer en escena Heidi y Marco.


Del Toro se ha marcado un caro homenaje/pastiche de la ciencia ficción nipona que tanto nos gustaba de críos, lamentablemente, nosotros hemos crecido y parece que Del Toro sigue flipando en colores con los gritos de Godzilla mientras destroza una ciudad. Del Toro sigue siendo un niño y ofrece ese gran espectáculo que todo niño encontrará divertido y estimulante a partes iguales. Pero yo ya no soy un niño, ni siquiera adolescente, y no he podido evitar sentirme decepcionado por esta película. Quizás buscaba un enfoque más serio o menos nostálgico, no sé.
 Quizás yo buscaba un tratamiento algo más adulto de los personajes o que hubiera algo de química entre la pareja formada por Rinko Kikuchi y Charlie Hunnam. Pero nada de ello ha sido posible. Mucho efecto especial y poca historia. Seguro que muchos aficionados a la ciencia ficción no le pedirán más y consiguieron teletransportarse a su infancia, no fue mi caso.
 Al menos Del Toro ofrece unas espectaculares escenas de lucha en las que no marea al espectador y en las que sabemos en todo momento lo que está pasando. A ver si aprende de una vez el negado de Michael Bay. Sin embargo, a pesar de la espectacularidad de las escenas a mí el film se me hizo largo debido a lo previsible de su trama. Ni los personajes están mínimamente perfilados ni lo que ocurra nos acaba de interesar lo más mínimo. Si lo de la premisa de los robots para luchar contra monstruos gigantes te parece poco original, espera a ver el desarrollo de la trama: Tenemos una vez más al héroe traumatizado que vuelve a la lucha por petición expresa de un amigo (de color, que hay que cubrir la cuota), de paso el tipo se liga a una joven con la que al principio no hacía buenas migas. Y no hay mucho más. Del Toro se saca de la manga a sus amigos Ron Perlman y Santiago Segura, a un par de científicos locos de lo más insoportable, un discurso sonrojante y la peli se acaba tras un buen rato de estridentes peleas que todos sabemos cómo van a acabar. Como las pelis viejas de los años 50 pero con un presupuesto de 180 millones de dólares.


Puede que para muchos Pacific Rim sea la película del verano, para mí es la decepción del verano. Guillermo Del Toro sigue teniendo buenas intenciones pero por ahora es incapaz de hacer esa gran película de ciencia ficción que lleva intentando hacer desde el inicio de su carrera.


Decepcionante.

4,5

viernes, 23 de agosto de 2013

El expediente Warren (The conjuring)



 Parece que para muchos James Wan es la gran esperanza del cine de terror. Tras Saw (que generó una terrible saga) e Insidious nos llega ahora El expediente Warren.

Sinceramente, no creo que Wan sea el salvador de este género. Visto lo visto, yo diría que es un un hábil reciclador y poco más. Expediente Warren en una eficiente cinta de casas encantadas, posesiones y exorcismos como hemos visto cientos. Hay que reconocer que James Wan hace muy buen uso de los recursos de siempre: puertas que se golpean, cortinas que se mueven, pasillos oscuros, escaleras tenebrosas, sótanos amenazantes, etc, pero lo hace con estilo. Obviamente su film bebe de muchas otras obras anteriores como El exorcista, El ente, Al final de la escalera, El sexto sentido e incluso Los pájaros. James Wan no inventa nada, más bien se dedica a copiar descaradamente, pero sabe sacar sacar partido a los tópicos del género. Tópicos que este film demuestra que siguen funcionando, sobretodo entre los más jóvenes que probablemente no hayan visto las películas antes mencionadas. Ellos son los que más la disfrutarán.

 James Wan consigue meter el miedo en el cuerpo del espectador usando elementos tan manidos como los juegos infantiles, muñecas o la escena de la caja de música. Escenas bien llevadas a cabo, casi de forma académica, que recuerdan a los clásicos y que triunfan al conseguir que el espectador no aparte la mirada ni un segundo de la pantalla. Wan acierta de pleno mientras se ajusta a los cánones del cine clásico de terror y consigue mantener la tensión en el espectador durante buena parte de su metraje, algo que es muy de agradecer hoy en día. Lamentablemente, al final del film le puede su lado más efectista y decide mostrar más de lo que debiera y abusa un poquito de los efectos especiales y de la espectacularidad.

Reconozco que el film tiene a su favor las interpretaciones de Ver Farmiga y la olvidad Lili Taylor. Ambas actrices me resultaron convincentes. También las hijas de la familia acosada me precieron verosímiles. Patrick Wilson me resultó algo inexpresivo (la verdad es que el tipo no tiene muchos registros).

Lo que no me gustó es que promocionen esta película como basada en una historia real. Por ahí no paso, no creo que sea relevante para la calidad del film, pero sí creo que es una mala treta para condicionar al espectador. No me creo que los hechos aquí narrados estén basados en hechos reales. El film se basa en los casos que unos estudiosos de lo paranormal (o vividores) dicen haber vivido, pero de ahí a que tales hechos sean verdad va un trecho. Quizás yo sea demasiado escéptico o demasiado mayor para creer en fantasmas, pero esta película es sólo un film de terror más, no tiene nada de verídico.

 Resumiendo, Expediente Warren consigue meter el miedo en el cuerpo del espectador a base de los manidos trucos de siempre. Lo cual no es original pero no deja de tener cierto mérito.

5


miércoles, 21 de agosto de 2013

Guerra Mundial Z (World War Z)


Parece que los zombies siguen estado de moda, tras unas décadas postergados a la serie B más casposa, parece que han vuelto a la vida para acaparar la atención de los grandes estudios y  hacerlos protagonistas de superproducciones como la que nos ocupa.

No es WWZ una película que me atrajera lo más mínimo, el trailer lleno de miles de zombies digitales agolpándose y formando montañas me recordó a esa bazofia de Soy leyenda. A pesar de todo, acabé viendo esta película y debo reconocer que no es tan mala como uno podía pensar, pero de ahí a ser buena dista un buen trecho.
Y no es buena precisamente porque estamos ante un blockbuster veraniego que busca complacer al mayor número posible de espectadores. Lo cual implica, en este caso, una total falta de personalidad. A la presencia de la mega estrella Brad Pitt hemos de sumarle que en el film se evita deliberadamente mostrar al espectador elementos desagradables como vísceras, sangre, etc. World War Z es un film de zombies light, muy light para mi gusto. Es un film de zombies para aquellos que no les gustan este tipo de pelis. No puedo dejar pasar que en el guión hay demasiado tópico, si incluso una hija de los protagonistas tiene asma y al héroe le ayuda un amigo de color. Más tópicos no se pueden incluir, leñe.

WWZ ni da miedo, ni tiene sustos ni es capaz de mantener al espectador en vilo ni poniendo en peligro a las hijas del protagonista.  Lo único novedoso de este film frente a otros de este tipo como 28 semanas después es que realiza un periplo por medio mundo en busca del origen de la infección (cosa que al espectador le importa un bledo, dicho sea de paso). Así se cambia varias veces de localización pero se desaprovecha la oportunidad de trazar una visión crítica del mundo en el que vivimos, sólo se critica un poco al régimen de Corea del Norte (que por algo forma parte del eje del mal). Por contra, Israel sale bastante bien parado (que por algo es aliado). No se aprovecha la excusa de la invasión zombie para criticar aspectos de la realidad del momento. No hay un mensaje ni una moraleja detrás de esta historia.

 Estos zombies por ordenador quedan chapuceros, prefiero los de Walking dead aunque sean más lentos. La manía del director Marc Foster de mover continuamente la cámara (¿para que no se note lo cutre de los efectos especiales?) sólo consigue que el espectador se maree y no se entere de nada. Tampoco la historia es especialmente emocionante mi está rodada de forma eficiente. Sí se deja ver (sobre todo si eres fan del guaperas de Brad Pitt) pero poco más.

Pero lo que más me chirrió no fueron los efectos especiales ni la desastrosa forma de mostrar la acción, fue el personaje de Brad Pitt. Un tipo que es todo un héroe americano: buen padre de familia, buen profesional, empleado de la ONU nada menos, gran capacidad paras el sacrificio, grandes dotes de mando, etc, encima es siempre el primero en darse cuenta de las cosas. Jo, qué tío. Sólo le faltaba tener la jeta de Brad Pitt. Actor que es muy guapo y se conserva muy bien e incluso no me duelen prendas a decir que es buen actor. Pero aquí, a pesar de su esfuerzo, no hay quien se crea a su personaje. Me gustó más Mireille Enos (The killing) en su papel de abnegada madre de familia y sufrida esposa del héroe que se queda cuidando de los hijos mientras su marido salva al mundo.

Por cierto, la música del film corre a cargo de Matt Bellamy, el de Muse, cuya partitura no deja de ser un calco del Tubular Bells de  Mike Oldfield


 Lo dicho. Flojita.

4,5

sábado, 17 de agosto de 2013

Escenas memorables: El inicio de Sed de mal (Touch of evil, 1958)

 En 1958 Orson Wells demostró una vez más su enorme talento con el film Sed de mal. Ya desde su inicio el film es una maravilla. Aquí os dejo sus títulos iniciales en los que un único plano secuencia rodado con una grúa y acompañado por la música del genial Henry Mancini es todo lo que necesita Wells para hacer una escena magnífica llena de ritmo y tensión. Wells inicia el film de una forma directa, mostrando una bomba que es introducida en el maletero de un coche y el recorrido de éste por las calles. El espectador no sabe cuando va a explotar la bomba, ni el motivo, ni quien es la víctima ni quien es el asesino. Todo un prodigio de narración fílmica.

lunes, 12 de agosto de 2013

Antes de medianoche (Before midnight,2013)



Casi una década despues volvemos a encontrarnos con Jesse y Celine. Ahora de vacaciones por Grecia. Su relación ha madurado con los años, del amor de juventud se ha ido conviertiendo en algo muy distinto.
Ni ellos ni nosotros somos ya los mismos de hace casi 20 años, todos hemos cambiado y es hora de afrontar los cambios.
por suerte, esta tercera entrega no se limita a paseos de los dos protagonistas mientras charlan sobre lo humano y lo divino (bueno, de esto último bastante poco, ya me entédeis, es una forma de hablar). El guión  permite la inclusión de otras parejas en una divertida escena en la que una tertulia de sobremesa se convierte en una animada escena. En dicha escena tenemos a varias parejas de distintas procedencias y edades lo que le confiere al film una mayor riqueza que sus antecesoras, hay otros puntos de vista y otras formas de ver la vida. Ya no sólo asistimos al mundo según Jesse y Céline, hay otras maneras de ver la vida. Tampoco creo que haya sido casual que este film se desarrolle en Grecia, país cuna de la civilización y uno de los que peor lo están pasando con la crisis económica. Tampoco la relación entre nuestros protagonistas está en su mejor momento, el tiempo hace mella en su relación y las tensiones son inevitables.


 Lo interesante de esta serie de películas es que el espectador puede ver la evolución de los personajes, era de esperar que en este film se despejaran las dudas que se crearon con la anterior sobre el futuro de los personajes, pero no por ello el film resulta obvio o aburrido. Yo pasé un buen rato, creo que el guión es todo un acierto y tantos los actores como el director están más que correctos.

 Creo que tanto Ethan Hawke como Julie Delpy han cambiado física y profesionalmente y se nota que también han participado en el guión. Su interpretación está acorde con lo visto en las dos entregas anteriores e incluso aportan matices nuevos. Este tipo de cine americano a la europea entiendo que a algunos espectadores se les haga pesado o aburrido, pero yo encuentro reconfortante ver a personajes que son capaces de pensar y reflexionar. Para mí no es ningún problema este esquema casi teatral siempre que haya una buena historia y unas buenas líneas de diálogo. Como así es en este caso.


En definitiva,tras ver las tres películas en un fin de semana, creo que son un buen ejemplo de la evolución de una pareja, pasando de la idealización excesiva del otro en los primeros momentos (eso que se llama enamoramiento) al amor maduro en el que cada uno acepta sus propios defectos y quizás, con suerte, los de el otro.

El único pensamiento negativo que me viene a la mente es que Richard Linklater ha necesitado tres películas para contarnos esta evolución mientras Derek Cianfrance logró lo mismo sólo con la excelente Blue Valentine.




sábado, 10 de agosto de 2013

Antes del atardecer (Before sunset, 2004)

Nueve años después de Before sunrise llegó Before Sunset y nos despejó algunas interrogantes sobre la relación entre Jesse y Céline.

Nueve años después sus destinos vuelven a cruzarse, han madurado y ya no son tan inocentes. Han pasado muchas cosas en sus vidas y empiezan a ver la vida de otra manera. La pareja protagonista ya no son veinteañeros y en sus diálogos empieza a verse algo de amargura por los sueños incumplidos y los errores cometidos. Obviamente, ninguna ha podido olvidar la noche que pasaron juntos en Viena y ahora se les presenta una segunda oportunidad paseando por las calles de París.
Tengo que reconocer que esta segunda parte me gustó más que la primera, se me hizo más amena. Los protagonistas me parecieron menos ñoños y sus diálogos me resultaron más interesantes.  Por supuesto, la vida ha deparado sorpresas a nuestra pareja de ñoños enamorados y también el espectador se llevará alguna que otra respecto a la supuesta evolución de la relación de los protagonistas. Por su parte Linklater imprime un ritmo muy acertado al film y reduce la duración del mismo a horas y media (media hora menos que su predecesora), logrando que el film se pase en un satiamén. El guión huye de ciertos lugares comunes y evita ser una comedia romántica al uso. Incluso en su estética Linklater evita planos de la Torre Eiffel, ¿Una peli ambientada en París sin un solo plano de la Torre Eiffel? No puede ser. Pues sí. Obviamente se nos nuestra el París más bohemio (viejas librerías, jardines, paseos por el Sena, Notre Dame, etc) pero su seña de identidad no aparece por ningún lado, ni creo que haga falta.

 Una vez más, Julie Delpy y Ethan Hawke son la personificación ideal de estos personajes. Los años les sentaron muy bien a ambos y su capacidad interpretativa creo que se vio aumentada (algo que Hawke no suele demostrar). Ambos participaron en el guión demostrando que el proyecto les importaba.
 Si me dan a elegir una de las tres películas, yo me quedo con la segunda. Me pareció la que tiene el mejor ritmo y en la que los personajes están mejor desarrollados y contiene los mejores diálogos. Además, ese final con música de Nina Simone me gustó mucho. Una vez más Linklater nos dejó un final ambiguo abierto a múltiples interpretaciones que sólo fueron confirmadas casi una década después.



jueves, 8 de agosto de 2013

Antes del amanecer (Before sunrise, 1995)



Before sunrise es catalogada generalmente como una película romántica. Para muchos de mi generación fue un film de culto, reconozco que no la había visto hasta ahora y , con la perspectiva de los años, creo que no ha envejecido nada mal. No me voy a hacer un defensor acérrimo del film, pero sí es verdad que tiene ciertos valores que, curiosamente, han ido mejorando con las sucesivas entregas.


Jesse es un joven norteamericano que conoce en un tren a Céline, una joven francesa. Entre ambos surge cierta atracción y deciden pasar un día paseando por las calles de Viena hasta que salga el avión que le devuelva a él a casa. La premisa no deja de ser curiosa pero es el desarrollo lo que más me gustó de este film. La forma de definir a los personajes a través de los diálogos que se establecen entre ambos protagonistas consigue que el espectador quede atrapado en esta historia. Sólo transcurre en unas pocas horas paseando por una ciudad europea (esquema casi copiado de las tres unidades del teatro clásico: tema, espacio y tiempo) pero Richard Linklater dota a su film de un atractivo especial que emana directamente de que a todos nos hubiera gustado vivir un romance así. 


  El film es más que recomendable sobre todo si alguna vez fuiste joven en la década de los noventa, eso que se llamó generación X y que se quedó en nada, o alguna vez fuiste de interail. Sin embargo, me chirriaron algunas cosas que se pueden pasar por alto sin demasiados problemas, como que la manera de conocerse y empezar su relación me pareció un poquito forzada. Tampoco nadie se cree que un americano veinteañero sea así de ñoño o sensible, no queda muy creíble pero... estamos ante un film romántico ¿no?. Algún esfuerzo hay que hacer, todos sabemos que los jóvenes de cualquier lugar del mundo sólo piensan en una cosa. La sensibilidad del personaje encarnado por Ethan Hawke es lo único que me falló un poquito de este film.

 Sí me creí sin problemas al personaje de Céline, la joven francesa soñadora y algo neurótica, una joven fuerte que quiere cambiar el mundo. El choque entre las dos culturas y me resultó muy interesante. El yanqui es más conformista y cínico, mientras Céline es una luchadora y aún cree (o quiere creer) en cosas tan ridículas como la magia y el amor. Pasajes como el del mendigo/poeta y la lectora de manos ponen de relieve sus diferencias y lo que realmente les atrae del otro. Ambos son jóvenes llenos de ilusiones e inexpertos en muchos aspectos pero están decididos a aprovechar una oportunidad de la que se arrepentirán toda su vida si la dejan pasar. 
Reconozco que en algún momento me resulto un tanto pesado tanto diálogo y quizás un recorte en el metraje no hubiera venido mal. Dos horas es mucho tiempo para centrarse sólo en los diálogos (sólo unos pocos genios son capaces de hacerlo) y las bellas imágenes de Viena. Por cierto, es una buena oportunidad para descubrir los pasajes más bellos de la capital del Danubio aunque se queda muy lejos de El tercer hombre.

 Linklater fue muy hábil al dejar el final lleno de interrogantes, por suerte nos sacó de dudas casi 10 años después. ¿Mucho tiempo? No creo, los personajes y los espectadores debíamos madurar.




martes, 6 de agosto de 2013

A puerta fría


 La próxima vez que trates mal a un comercial (reconozco que yo suelo hacerlo) piensa que también es una persona y que está intentando ganarse el pan como todo hijo de vecino. Puede que a nuestros ojos sean unos pesados con la sonrisa más falsa del mundo, pero es su trabajo.



 Al lío, A puerta fría es una buena película sobre el mundo de los comerciales y hasta dónde son capaces de llegar por vender. Puede que sepan que el producto que venden sea una puta mierda, pero su deber es venderlo a toda costa. La competencia es feroz y no lugar para los perdedores.

 Si para mantener este inestable y suicida sistema llamado Capitalismo debemos comprar sin parar, es evidente que alguien tiene que producir y alguien tiene que vender lo que se produce. Ahí es donde encajan los comerciales. Ellos podrían ser la metáfora de un sistema en profunda crisis que intenta sobrevivir a duras penas, el consumo se ha estancado y todo el sistema amenaza con desmoronarse.  
 El comercial encarnado por Antonio Dechent es un veterano comercial que no pasa por su mejor momento, se ve viejo e inútil (no sabe idiomas y las nuevas tecnologías se le resisten) en un mundo implacable que no deja tiempo ni para recobrar el aliento. Una vez fue el mejor pero esos tiempos ya quedan lejos. La feria que se celebra en un hotel durante un fin de semana será su oportunidad de salvar sus ventas. Para ello deberá usar sus mejores armas para lograr que el director de una gran compañía extranjera (Nick Nolte) le compre sus productos. Pero esta empresa le llevará a asociarse con una bella azafata y ambos pondrán en juego mucho más de lo que en principio estaban dispuestos a arriesgar. El mundo es un lugar mezquino y cruel en el que siguen dominando las bajas pasiones.


 El retrato del mundo comercial de esta película no puede ser más despiadado. No hay piedad y el ganador se lo lleva todo. Me gustó el guión de Xavi Puebla y Jesús Gil Vilda parece estar sacado de la observación directa de la forma de funcionar de este tipo de vendedores. Su diálogos desprenden una verosimilitud  que se ve certificada con el buen hacer de todo el elenco actoral.

 Me gustaron mucho los actores, creo que todos componen unas interpretaciones sólidas y creíbles. Me gusta mucho el saber hacer de Antonio Dechent y creo que aquí está en su mejor papel. Tambien María Valverde demuestra una vez más que es una joven a tener en cuenta, no sólo una cara bonita. De Nick Nolte sólo puedo decir que viendo el film me entró la duda de si estaba interpretando o realmente es así en la vida real. La escena del tipo andando por el pasillo del hotel hacia su habitación es un fantástico ejemplo de cómo un actor puede llenar la pantalla sin decir una sola palabra.

 En un momento dado, un personaje se pregunta cuando se fue todo al carajo, quizás siempre supimos que el sistema estaba condenado pero a nadie nos importó mientras nos fue bien.

7

domingo, 4 de agosto de 2013

Los últimos días




Los hermanos Pastor debutaron por todo lo alto con un film en Estados Unidos, Infectados , y ahora regresan a su país natal para su segunda película. Obviamente, el presupuesto no es el mismo y se nota.

Los Pastor siguen siendo unos hábiles narradores y parecen moverse como pez en el agua en este tipo de historias post -apocalípticas. Sin embargo, en esta ocasión, la cosa no acaba de funcionar como uno desearía, en buena parte por lo forzado de algunas situaciones y la resolución de algunas escenas.


La premisa me recordó a la excelente película de Buñuel El ángel exterminador aunque su desarrollo se parezca más a la penosa El incidente del sobrevalorado (por decirlo de alguna manera) Shyamalan, aunque supongo a a todos nos hubiera gustado que se pareciera más a La carretera (quiero pensar que a ello tendían los hermanos Pastor). La amenaza sin forma ni explicación no deja de ser atractiva pero en el caso que nos ocupa nunca acaba de ser totalmente creíble. Al menos, las interpretaciones de José Coronado (con lo poco que me gustaba a mí este tipo) y de Quim Gutiérrez (Primos) mantienen el interés del film. Marta Etura sigue estando más que bien en su papel de novia perfecta pero empieza a encasillarse y es muy joven todavía para ello. Lástima que el guión no aprovecha algo más la oportunidad y vaya más allá de los eternos lugares comunes de este tipo de películas. Es de elogiar que se empiece a hacer cine de género en este país y más con la crisis galopante que tenemos encima, aunque el resultado final no sea totalmente satisfactorio. Tampoco lo son la mayoría de las grandes producciones de Hollywood y cuestan 20 veces más.

 A un guión no del todo pulido hemos de sumarle que la falta de tiempo o presupuesto ha jugado en su contra, algunas escenas no está bien resueltas y algunos efectos digitales resultan un tanto cochambrosos. Una pena, la cosa prometía y tiene momentos de interés pero en conjunto no podemos hablar de un film redondo. Me pareció especialmente fuera de lugar la escena final, me recordó a un anuncio de Cola-Cao. De vergüenza ajena. No sé si es un añadido de última hora o estaba incluido en el guión, pero la forma de rodar al más puro estilo publicitario echa por tierra buena parte de los logros del film.
Parece lo apocalíptico se está poniendo de moda en el cine español tras Fin, ambas son propuestas nobles cuyo resultado no llega al aprobado.

4,5