Hablemos claro. Ya sabemos que Hollywood intenta en los últimos años remediar décadas de injusticias respecto a las minorías. Como si premiando a películas sobre temática racial, homosexual o feminista (aunque a veces no se lo merezcan) sirviera para paliar el ostracismo del pasado. Y este año parece que la cosa va de premiar a mujeres sí o sí. Hollywood es así, los premios son suyos y se los dan a quien les da la gana. Nada que objetar. Pero nominaciones como la de Black Panther a mejor película me siguen doliendo en mi alma de cinéfilo.