Mostrando entradas con la etiqueta Cómic. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Cómic. Mostrar todas las entradas

miércoles, 4 de mayo de 2016

Capitán América: Civil war


 Parece que Marvel/Disney se ha decidido finalmente a seguir pos pasos de su rival DC y sus películas están madurando. El tono irónico e intrascendente debía quedar atrás más pronto que tarde para dejar paso a unas tramas más complejas y oscuras. Es la llegada de la madurez a un cine que aspira únicamente a entretener a la vez que entiende que no se puede continuar eternamente repitiendo esquemas (a no ser que hablemos de James Bond). Capitán América: Civil war es la constatación de la intención por parte de Marvel de hacer un cine más adulto (tampoco tanto), un cine menos destinado a los niños y más centrado en conflictos morales y éticos. Ver a los súper héroes partirse el careto a mamporros es un espectáculo de acción y efectos digitales de primera mientras evidencia que no todo es o blanco o negro sino que hay infinitas tonalidades de gris.

 Este film adapta muy libremente la saga Civil War de Mark Millar (que tampoco me parece una maravilla aunque sea de lo más destacable de los últimos tiempos en Marvel) y lo hace de manera solvente. Los hermanos Russo (responsables de Capitán América: Soldado de invierno) repiten formula y entregan un film entretenido a rabiar que apenas deja un minuto de respiro al espectador. A pesar de sus 147 minutos la película se hace amena. Cierto que tiene algunos altibajos y algunas peleas se me antojaron superfluas pero estamos hablando de cine de acción y súper héroes. Por suerte todos los personajes están bastante bien desarrollados y tiene su espacio en el guión. Se ahonda en la relación ente Wanda (Elizabeth Olsen) y Visión (Paul Bettany) y se introduce a personajes como Ant-Man (Paul Rudd, quien salta desde su propia película), Black Panther o al nuevo Spider-Man (el tercero ya). Todos bastante bien integrados en este frenético crisol de tipos en mallas. Se está haciendo imprescindible ver todas las películas Marvel y tenerlas recientes en la memoria ya que uno corre el peligro de no saber de qué demonios están hablando los personajes.

No estamos ante un guión perfecto, ni mucho menos. No logra disipar la sensación de que las escenas de diálogo sean puro relleno hasta la siguiente escena de acción, pero lo hace dignamente. Todas ellas espectaculares y perfectamente rodadas, como era de esperar. La novedad viene en el cambio a ese tono más amargo lleno de luces y sombras. El Capitán América (Chris Evans) es el personaje ideal para representar este cambio. Su vieja moral de la Segunda Guerra Mundial quizás ya no tenga cabida en el complejo mundo actual. Antes los villanos eran fácilmente identificables (los nazis, los rusos) y las intenciones estaban claras por todas las partes. Pero todo aquello cambió, hoy el enemigo no muestra nunca su rostro y es difícilmente identificable. Por cierto, esa Hydra no deja de recordarme a Al-Qaeda. Me gustó también el cambio que sufre el otrora vividor e irresponsable Tony Stark (Robert Downey Jr). Aquí Stark parece tomar conciencia de las repercusiones de sus actos y abandona su característico tono auto suficiente e irónico. Stark parece aceptar que sus actos pueden poner en peligro las vidas de miles de personas inocentes. La lucha por aceptar o no el control gubernamental (en la peli ejercido por Naciones Unidas y no exclusivamente por el gobierno USA) será la espoleta que hará saltar un conflicto que se verá avivado por la obstinación del Capitán América por defender a su antiguo compañero Bucky Barnes (ahora transformado en Winter Soldier). Todo ello manejado entre las sombras por un decepcionante Helmut Zemo (Daniel Brühl). Ocurre que esta vez el villano de la función no está a la altura, ni me creo sus motivaciones ni su plan es mínimamente verosímil. Mejor no buscarle tres pies al gato en este tipo de cine pero lo de este personaje es de traca. Al final sus endebles maquinaciones para enfrentar a los héroes no resultan creíbles por muy buenos resultados que den. Esperemos que el personaje reciba en un futuro el tratamiento que se merece, yo no pierdo la esperanza de verlo con su máscara.

Es en su tercio final cuando el film muestra sus mejores bazas y se pone trágico (tampoco mucho). El cisma entre las filas de súper héroes se hace inevitable y el enfrentamiento tendrá importantes consecuencias aunque creo que les ha faltado valor para llevar las cosas más lejos. Es cine palomitero, al fin y al cabo. La lucha final entre Iron Man y el Capitán América alcanza unas cotas de drama que no se habían visto todavía en el cine de Marvel. Había pocos niños en la sala pero apuesto a que esa escena no les hizo ninguna gracia.
 Otro asunto importante de cara a un futuro ¿Me gustó la introducción del nuevo Spider-man? La verdad es que sí, me parece todo un acierto. Me gustó Tom Holland (Lo imposible) y la forma en la que se ha enfocado el personaje. Cualquier cosa es mejor que aquel Spider-man de Andrew Garlfield. Parece que Sony finalmente ha cedido los derechos a Marvel y ésta ya puede sacar a Spider-Man. Buena noticia. Lo único que me desentonó fue ese flirteo entre Tony Stark y una tía May todavía de buen ver (Marisa Tomei).

Me queda la duda del motivo por el que esta película forma parte de la saga del Capitán América y no de Los vengadores, realmente es más un film de Los vengadores que del Capitán América. Supongo que realmente poco importa y todo es una cuestión de marketing.


Lo dicho, buen entretenimiento algo más maduro de lo habitual.

lunes, 4 de mayo de 2015

Vengadores: La era de Ultrón


 La verdad es que sólo con ironía y nostalgia se puede enfrentar el espectador adulto a estas películas de super héroes en mallas. El cine comercial ha comenzado hace décadas un viaje sin retorno hacia el espectáculo total desprovisto de alma. ¿Llegaremos a un punto en el que una aplicación generará una película digital a medida de los gustos del espectador? ¿Quedará hueco para la sorpresa? ¿Tiene alma el cine del estudio Marvel? No lo sé, pero nosotros tenemos (todavía) nuestro corazoncito.

 Ya tenemos aquí al esperada segunda parte de Los Vengadores. Visto lo bien que han funcionado las últimas entregas de los estudios Marvel, era de esperar que esta nueva entrega no se moviera ni un ápice de la fómula del éxito. Así ha sido. Los vengadores 2 no aporta nada nuevo que no hayamos visto ya, es más de lo mismo pero ampliado. Los fans de los superhéroes Marvel y los fans de este cine de acción saldrán más que satisfechos. No procede pedirles nada más a estas películas. Leñe, que muchos crecimos con estos personajes y hay que reconocer que estas adaptaciones son muy entretenidas. No filosofemos más, por favor.

 Hagamos un poco de historia. La bancarrota a la que parecía destinada la editorial Marvel a mediados de los años 90 le obligó a vender los derechos de algunos de sus personajes a los grandes estudios cinematográficos para su explotación. Así, Fox compró los derechos de los mutantes (X-men) y los 4 Fantásticos.  Por su parte, Sony compró los derechos de Spider-man. Sin embargo, el éxito de las adaptaciones realizadas por los grandes estudios hizo que Marvel (una vez saneadas sus cuentas) se lanzara a la explotación del catálogo de personajes que aún retenía. Todo ello nos lleva a que hoy Sony sigue explotando Spider-man de forma rastrera y Fox ataca una vez más con otro film sobre los 4 Fantásticos. Finalmente, Marvel ha decidido cancelar la publicación de los cómics de los 4 Fantásticos tras más de 50 años, parece que la bajada de ventas y la imposibilidad de rentabilizar la serie en futuras películas han sido decisivas. Amén que hacerle publicidad a otro estudio no debía hacerles mucha gracia. Seamos francos, ya antes de caer en manos de Disney, Marvel se ha convertido en un estudio de cine para el cual la publicación de cómics es un negocio secundario.
 Sin embargo, lo más sangrante y llamativo para el espectador es que algunos personajes tienen los derechos compartidos entre Fox y Marvel. Así, Quicksilver apareció en X-men Días del futuro pasado (siendo lo más divertido del film) y también aparece en esta Los Vengadores 2. Como Fox tiene el derecho de explotación de todos los mutantes, Quicksilver no es un mutante sino un mejorado (ojito a la artimaña). Lo mismo ocurre con su hermana Wanda (La bruja escarlata), aquí ambos no son mutantes ni hijos de Magneto (ya que éste también es un mutante y no se le puede ni nombrar en una peli Marvel).
 El guión de La era de Ultrón no es gran cosa pero tiene los suficientes elementos de humor, ironía e incluso emoción como para hacernos sentir otra vez como cuando leíamos las historias de estos personajes siendo unos críos. De hecho, el público infantil y juvenil es el target mayoritario de Marvel y su mayor logro es que los adultos también podamos disfrutar de sus películas. Hay mucha pelea, mucho ego y algo de sensiblería para que los héroes no parezcan meras máquinas de luchar. Tony Stark sigue siendo el pilar angular del grupo pero el resto de personajes gana protagonismo haciendo que el conjunto resulte bastante equilibrado. Todos tienen su momento para lucirse y me gustó el trato que se dispensa a secundarios como La viuda negra, Ojo de Halcón o el doctor Banner.
Lamentablemente, el villano de la fución no está a la altura de lo esperado. Más allá de su primera aparición, Ultrón resulta un villano un tanto endeble y poco terrorífico. Su amenaza sobre el planeta tierra no hay quien se la tome en serio, la verdad. Una lástima. Ya sabemos que el villano es fundamental en este tipo de cine y aquí no ha estado a la altura. Tampoco entiendí la necesidad que tiene Ultrón de mover los labios para hablar (¿no era un robot?). Me pareció mucho más atractivo el personaje de Wanda, por sus poderes y su apariencia, que el de Ultrón. Me gustó también el tratamiento del personaje de Visión, la verdad es que Paul Bettany es clavadito al personaje.

  La era de Ultrón funciona a las mil maravillas si lo que buscas es acción a raudales. Los vengadores 2 es una montaña rusa que una vez que no deja ni un segundo de respiro al espectador. Por momentos me recordó a Transformers (esa lucha entre Iron man y Hulk parece rodada por un Michael Bay hasta arriba de ácido) y a Fast & the furious. Estas tres sagas son claros exponentes del cine de acción moderno, un cine al que no hay que exigirle nada más allá de la acción sin freno. Nada de filosofar sobre el origen y la deriva del ser humano, no procede. Esto es cine de consumo inmediato. Obviamente, yo prefiero Los vengadores aunque sólo sea por el cariño que les tengo a los personajes.
Esta vez no había que contar cómo se forma el grupo y el guión se permite desarrollar las relaciones interpersonales entre los vengadores. Sigue habiendo piques y peleas entre ellos que harán las delicias de los espectadores. Nos se traiciona nada de lo mostrado en las anteriores películas de Marvel y las tramas están bien integradas. Se habla de personajes ya vistos en las películas de Thor, Iron Man o El capitán América dando la sensación de que estamos realmente en un universo cohesionado.
El film sufre un claro parón pasada la mitad del metraje (la granja) pero creo que le viene bien para que el espectador recupere el aliento y los personajes puedan reflexionar. La cosa no es grave, es un paso atrás para coger carrerilla hacia un final simplemente tan absurdo como grandioso y estridente.

  El director Joss Whedon cumple una vez más y ofrece un espectáculo vibrante  y apabullante. Su estilo narrativo no presenta aquí ninguna novedad. El tipo no ha inventado nada pero al menos no estropea la historia que tiene entre manos. La peli se ve sin problemas y sus 142 minutos no se me hicieron pesados en ningún momento, tampoco las batallas me parecieron eternas ni difíciles. El apartado técnico tiene el mérito de incorporar a decenas de personajes interactuando con miles de efectos especiales y que la cosa no quede incomprensible. Obviamente se han gastado mucho más dinero en efectos que en un buen guión. Sí me molestaron un poco el abuso de la cámara lenta y alguna fantasmada pero sin llegar nunca a lastrar el film.

Reconozco que quizás me estoy haciendo mayor para este tipo de cine tan frenético, salí de la sala de cine aturdido pero satisfecho. No me esperaba nada más ni nada menos de lo que esta película me ha dado. Un film ideal para desconectar y volver a sentirnos como un niño.

jueves, 8 de mayo de 2014

Rompenieves (Snowpiercer)


El director surcoreano Bong Joon-ho, responsable de Memories of murder y The host, nos ofrece ahora esta peculiar película de ciencia ficción basada en el cómic francés Le Transperceneige. The snowpiercer nos presenta un mundo post apocalíptico tras un intento de revertir el cambio climático que sale francamente mal y en el que los pocos supervivientes viven en un tren en constante movimiento.




Me encantan las películas que transcurren en trenes, me parece un medio de transporte que es todo un mundo en sí mismo. Me vienen a la cabeza películas como El tren, Extraños en un tren, Asesinato en el Orient express, Tren al infierno o El puente de Cassandra. También me gustan las peliculas post apocalípticas cuando tienen algo de miga y no sólo efectos especiales. Así pues, esta película tenía de partida bastantes puntos a su favor.

 Como toda buena película de ciencia ficción que se precie,  sirve como metáfora de los problemas actuales de la sociedad. Admito que su premisa argumental (todos los supervivientes acinados en un tren siempre en marcha) es bastante inverosímil, pero cosas peores hemos visto y creído en una pantalla. Si el espectador hace el pequeño esfuerzo de meterse en la trama, su metáfora sobre la sociedad actual resulta de lo más gratificante. ¿Es el tren una metáfora del capitalismo imparable?. En el tren del film asistimos a una sociedad dividida en clases en las que los ricos y poderosos no permiten que los pobres salgan de sus vagones, cada uno debe cumplir su rol en la sociedad. Si te ha tocado nacer y vivir en un vagón de cola, estas jodido. Obviamente habrá quién no se resigne a la pobreza y de ahí el conflicto de clases que plantea el film.
 No hay que ser filósofo para ver el paralelismo entre nuestras fronteras actuales y las puertas de los vagones. Tampoco hay que ser muy listo para intuir cierta crítica al uso de la fuerza para evitar que los pobres escapen de la pobreza en busca de un futuro mejor. Los recientes sucesos en la tristemente célebre valla de Melilla no difieren mucho de algunas escenas de este film. 
 También creo que hay que destacar cómo está tratado el tema de la educación y el control de las masas para que cada uno cumpla su rol en la sociedad. Igualmente el liderazgo y la capacidad de sacrificio son temas sobre los que el film tiene algo interesante que aportar.
Vamos, que bajo la apariencia de un film apocalíptico del montón tenemos una arriesgada película que intenta aunar entretenimiento y una sobria reflexión sobre la condición humana. Que lo consiga es opinable.

 Durente el visionado del film me vinieron a la mente otras películas de ciencia ficción con las que comparte algún punto en común. Me refiero a films como Soylent green (Cuando el futuro nos alcance) o Matrix. Por suerte, Snowpiercer no es una mera copia ni un conglomerado de ideas robadas y aporta bastantes elementos de interés. Me resultó muy estimulante ese enfoque pesimista sobre la condición humana cercano al mostrado en Blindness.

Que nadie se engañe por la aparición de Chris Evans, no estamos ante un film Hollywoodense palomitero al estilo del Capitan América. Estamos ante un film coreano y como tal es violento y excesivo. Una trama irregular y descompondensada pero atractiva. Al final Bong Joon-ho pierde un poco los papeles y su violencia excesivamente coreografiada perjudica un poco la credibilidad de los hechos mostrados. Ya sabemos como se las gastan los coreanos. También unos efectos especiales algo mejorables en algún momento le hacen perder enteros al film.

 Los actores están correctos, tanto John Hurt como como Jamie Bell están bastante creíbles. Sin embargo es Chris Evans el que me sorprendió gratamente. Este muchacho demuestra con este proyecto que es algo más que una montaña de músculos y que no le teme al riesgo. La que tampoco le teme al riesgo es Tilda Swinton aunque en esta ocasión su personaje resulte bastante ridículo, siendo lo peor del film. Tanto su caracterización (esas gafas y esa dentadura son de traca) como su sobreactuada interpretación (casi una caricatura de Margaret Tatcher) dejan ver esa vena histriónica que a veces le sale a Bong Joon-ho.

   Snowpiercer no es una gran película pero sí es una estimulante propuesta post apocalíptica que os hará pasar un buen rato.


6,5

domingo, 30 de marzo de 2014

300: El origen de un imperio


 Por mucho que me pese, Zack Snyder creó escuela con 300, su adaptación del cómic de Frank Miller.  La película fue un rotundo éxito y su estética ha dejado una marca innegable en películas y series de televisión posteriores (como la serie Spartacus, por poner sólo un ejemplo).

Si 300 narraba la gesta del rey Leónidas de Esparta y sus 300 soldados intentando frenar el paso del ejército del rey persa Jerjes en el desfiladero de las Termópilas allá por el 480 a.C. era de esperar que pronto se realizara una secuela. Sin embargo, han tardado 7 años en llevarla a cabo. 300: el origen de un imperio no es una secuela propiamente dicha, sino más bien un spin off o yo qué se, ya que narra hechos que ocurren antes (la batalla de Maratón en la Primera Guerra Médica), a la vez y posteriormente (La batalla naval de Salamina) al film original. Se podría interpretar como un complemento del primer film. Si 300 nos narraba la lucha en tierra, esta nueva entrega nos narra la lucha por mar entre las tropas de Jerjes y los griegos.
Esta vez a los mandos de la nave no está Zack Snyder sino el desconocido, al menos para mi, Noam Murro, quien se dedica a seguir con la estética y la forma de rodar fijada por Snyder. Obviamente, el film está saturado de sangre hecha digitalmente, miembros seccionados y pectorales hiperdesarrollados, aunque menos que en la primera entrega. Si bien es cierto que esta vez el apartado visual ya no nos impresiona tanto, al menos el film logra mantener el interés. En ese aspecto creo que es superior al original, toda la historia de la reina Gorgo en Esparta mientras su marido lucha en las Termópilas se me antojó un relleno inútil. Sin embargo, aquí las tramas están mejor hilvanadas y no hay rellenos de bulto.
 Quizás se deba a que la presencia de Eva Green cono Artemisa le haga subir enteros al film. Creo que este personaje es lo mejor de la película, una villana de una pieza, de esas que dejan huella. Incluso es capaz de eclipsar al propio Rey Dios Jerjes. Quizás sea el personaje histórico al que más elementos se le han añadido, pero este film está lleno de anacronismos y no debe ser tomado nunca como un film histórico, ni mucho menos. Las guerras Médicas son una excusa para ofrecer un gran espectáculo visual, nada más.
Puede que Sullivan Stapleton no tenga ni los abdominales ni el carisma de Gerard Butler (al cual se echa de menos) pero su Temistocles tampoco anda falto de personalidad. Puede que Leónidas tuviera las cosas muy claras, este Temistocles me pareció un personaje más interesante ya que conoce la culpa y la duda.



Lamentablemente, hay arengas un tanto forzadas (algo inevitable) y decenas de batallas. Pero la relación entre Artemisa y Temistocles hizo que el film se me hiciera mucho más llevadero que el original. No miré la hora en ningún momento, cosa que sí hice con 300. Yo pensaba que esta película iba a ser un mero calco de la original y me he encontrado que, a pesar de seguir los cánones visuales de la primera, su desarrollo está algo más elaborado y me ha gustado un poquito más.


5,5

lunes, 10 de febrero de 2014

Arrugas


Tanto el cómic como el cine de animación comparten el falso estigma de estar destinados a un público infantil y/o adolescente. No tiene por qué ser así. Tanto el cómic como el cine de animación pueden abordar temáticas adultas con resultados más que satisfactorios. Arrugas es un claro ejemplo.

Ya hemos hablado alguna vez de cómo la sociedad en general y el cine en particular parecen olvidarse deliberadamente de los ancianos. Hecho que considero un tremendo error. Cierto que cuando uno es joven no quiere preocuparse por problemas que aún le quedan muy lejos y que  las salas de cine sobreviven gracias a los sectores más jóvenes de la población, pero olvidarnos de un sector tan amplio de la sociedad y del que tanto tenemos que aprender no puede ser bueno ni a corto ni a largo plazo.

A mí las residencias de ancianos me dan más escalofríos que los cementerios. Me recuerdan a las cárceles o los campos de concentración. Sus vallas me parecen más destinadas a evitar que se escapen los internos que a evitar posibles robos. Tanto los ancianos como los presos parecen ser personas que no tienen hueco entre la sociedad y deben de ser recluidos y condenados a la soledad. El caso de los ancianos es mucho más doloroso, ya que ellos no han cometido delito alguno, sólo ya no son útiles para la sociedad y se han convertido en un estorbo. Es duro, pero la alta esperanza de vida actual nos está llevando a estos extremos. Sólo espero no tener que llevar jamás a un familiar mío a un geriátrico ni acabar mis días allí dentro.


Arrugas es un cómic de Paco Roca (con el que ganó el premio Nacional de Cómic en 2008) que fue adaptado a la gran pantalla por Ignacio Ferreras. Ambas obras comparten una visión valiente de la tercera edad. Ambas afrontan la terrible soledad de sus protagonistas y no caen en el error de intentar suavizar artificialmente los hechos narrados ni buscar la lágrima fácil (cosa que, al menos en mi caso, sí consiguió). Arrugas emparenta directamente con ese cine de animación que tiene en films como Cuando el viento sopla o La tumba de las luciérnagas sus mayores exponentes. A pesar del amable aspecto visual, los temas tratados son de una terrible dureza. Con un dibujo sencillo (heredero del anime japonés) y una limpieza en los trazos, el film se apodera del espectador y pronto le pone el corazón en un puño. Sin alardes técnicos innecesarios y una estupenda presentación de personajes, el film atrapa al espectador sin remisión.

La soledad y el daño provocado por una enfermedad tan terrible como el Alzheimer son el eje central del film. Si la memoria es parte fundamental de nuestra personalidad, los enfermos de Alzheimer no sólo pierden sus recuerdos sino que pierden también su personalidad. En Arrugas también hay hueco para la amistad y la camaradería, siendo casi un film de colegas en apuros (aunque sean ancianos) o incluso del subgénero de fugas. Debo destacar a la pareja formada por los ancianos Emilio y Miguel (tan opuestos entre sí como necesarios el uno para el otro), en mi opinión es una de las mejores del cine español de los últimos años. Es una extraña pareja atrapada que intentará evadirse de la rutina hasta que el avance de la enfermedad sea ya irreversible. Desean seguir viviendo mientras sean capaces de saber quienes han sido. También el tema del sacrificio por los demás está tratado de forma admirable.

No son pocas las veces en las que la emoción se asomó a mis ojos en forma de lágrimas. Sólo por la ternura y la valentía con la que se abordan la vejez y la muerte (muy lejos del paternalismo y la ñoñería de Disney) vale la pena ver esta estupenda película.

7,5

martes, 14 de mayo de 2013

Iron man 3


 Pues nada, esta franquicia sobre Iron man se cierra de la misma manera que se inició, sin ninguna pretensión excepto hacer pasar un buen rato. Los fans de la saga no saldrán decepcionados y los que no disfrutaron las dos primeras entregas tampoco lo harán con la tercera.

 Iron man 3 es más de lo mismo, es cierto que se centra más en el personaje de Tony Stark y sus problemas personales pero sigue siendo cine palomitero apto para todos los públicos. Iron man 3 es puro espectáculo hueco lleno de efectos especiales y vertiginosas escenas de acción, alguna realmente espectacular. Lo que salva a estas películas es la interpretación de Robert Downey Jr., así de claro. Estas películas interpretadas por  Nicholas Cage o Keanu Reeves serían insoportables. Las tablas y la sorna de Downey son un valor añadido a esta franquicia destinada al público juvenil que la hace disfrutable para el resto de públicos.

  Shane Black toma el relevo en la dirección a Jon Favreau quien en esta entrega se limita a actuar (bastante mal, todo hay que decirlo). El director de  Kiss Kiss Bang Bang (interpretada por Robert Downey Jr) hace un trabajo digno, su estilo apenas se nota en el film (es lo que se pretende en un blockbuster, que no se note la mano de su director, esto no es cine de autor). El film se ve sin problemas y tiene un ritmo adecuado, pasando sus más de 120 minutos sin apenas darte cuenta. Tengo que reconocer que no me gustó el inicio del film, todo lo referente al jefe de seguridad (Jon Favreau) me pareció ridículo. Se nota que han intentando buscar un equilibrio entre la comedia y la peli de superhéroes algo más seria, pero la comedia ha salido ganando. Realmente no vemos pasarlo mal a Tony Stark, siempre le queda una bravuconada por decir, aunque lo haya perdido todo. lamentablemente los villanos no son demasiado interesantes. El mandarín parece que va a ser un villano a la altura pero se desinfla a mitad de metraje. Por cierto, ¿no debería ser chino El mandarín? aquí lo han convertido en un fantoche con pinta de terrorista islámico. Parece que comercialmente es mejor que el villano no sea chino, China es una gran potencia con un gran mercado, mejor no enfadarles. Hay muchos más cines en China que en Oriente Medio.

 La película es una sucesión de chorradas sin sentido y frases ingeniosas del macarra de Tony Stark, pero divierte lo justo. No llega al nivel de Los Vengadores, pero es sin duda uno de los blockbusters del año. Esperemos que Marvel siga por este camino.

 No le pidan nada a esta película, déjense llevar por el niño que llevan dentro y puede que pasen un rato más que aceptable. 

5

lunes, 31 de diciembre de 2012

Dredd


  Que sí, esta nueva versión de El Juez Dredd no es tan mala como la de Stallone, pero no es lo que yo esperaba, la verdad. Adaptar este violento cómic de culto no era tarea fácil, puedes quedarte corto buscando la corrección política y gustar al gran público (la vía Stallone) o puedes ser fiel al material original y hacer un film poco comercial. Aquí parece que no supieron qué opción seguir y han optado por el camino de en medio llegando a ninguna parte.

Dredd no es una mala película pero no es lo suficientemente gamberra, le falta esa mala baba políticamente incorrecta del cómic original. La historia no acaba de cuajar, cae en demasiadas situaciones de sobra conocidas y aburre por momentos. Dredd es un cabrón, sí, casi tanto como los villanos a los que juzga y elimina (todo en uno) pero la película se limita a un juego del gato y el ratón dentro de un enorme bloque de edificios. No hay una trama suficientemente elaborada ni se saben desarrollar las situaciones.  Más parece un remake de La jungla de cristal que una adaptación del Juez Dredd. Se ha sido bastante fiel al cómic pero no han sabido ir más allá del mero homenaje, contando una historia bastante simplona que explora bastante poco el sucio y cruel mundo del personaje. Parece que han mirado demasiado la taquilla y han rebajado bastante la carga de sexo y violencia del cómic, demostrando una preocupante estrechez de miras.


 La dirección de Pete Travis (En el punto de mira) no aporta nada novedoso y se limita a copiar el estilo visual de la ya lejana Matrix. Tampoco es capaz de dotar a la historia de la tensión necesaria. Realmente la acción no es novedosa ni especialmente violenta (mucho efecto digital de cabezas explotando pero que no impresionan. Quizás la colorida y estridente fotografía pensada para el 3D no fue una buena idea, sobre todo si pensamos que algunos decorados y efectos se ven un poco cutres.


 El casting es otro problema añadido al film. Karl Urban es un actor bastante penoso, para qué vamos a andarnos con rodeos, aquí está correcto gracias a que no se quita el casco en toda la película, aún así me parece que exagera el famoso rictus de cabreo del personaje incluso más de lo que lo hizo Stallone en la primera versión. Tampoco Olivia Thirlby (hay que ver lo que se parece esta chica a la insufrible Lady Gaga) me acabó de convencer, su papel de mutante psíquica ocupa mucho metraje y realmente no aporta mucho. Tampoco los villanos están a la altura, Lena Headey (300, Juego de tronos) está muy guapa hasta con cicatrices pero no resulta una malvada a la altura del personaje, sólo al final  se muestra realmente fría y peligrosa.

A mí me supo a poco.

4,5

lunes, 29 de octubre de 2012

The amazing spider-man



¿Quién necesitaba otra película sobre Spider-man? Nadie, las tres películas de Sam Raimi no estaban mal (excepto la tercera) y están muy recientes aún en la memoria (la primera es del año 2002 y la última del 2007). Tampoco los efectos especiales han evolucionado tanto en estos 5 años como para hacer mucho más espectaculares los vuelos del trepamuros entre los rascacielos. Así pues, no hacía falta volver sobre el personaje y mucho menos volver a contarnos sus orígenes. Este reboot (o reinicio o vuelta a empezar) parte con el problema de que es totalmente innecesario.


Otro problema añadido es que detrás de las cámaras no hay un veterano director con un estilo propio (aunque sometido a los dictados del cine comercial) como el Raimi de la saga original. Aquí dirige Marc Webb, un joven director cuya opera prima 500 días juntos me gustó mucho, pero que ahora se ha enredado en la red de este innecesario blockbuster sobre el hombre araña y ha salido bastante mal parado. Es Amazing Spider-man  un film de estudio sin hueco para el lucimiento del director. Los problemas no acaban aquí, en el guión se ha permitido el lujo de modificar los orígenes del personaje clásico adaptándolos a los nuevos tiempos tipo las colecciones ultimate, vamos, volver a contar  los inicios de los personajes Marvel clásicos pero adaptados a la época actual, no olvidemos que las primeras hazañas del trepamuros se publicaron en los años 60. No me gustó todo el rollo de implicar a los padres de Peter Parker con la corporación Osborn ni cómo muere el tío Ben. Me gustó mucho más en la original. Tampoco me pareció creíble que todo el mundo descubra quien demonios se esconde bajo la máscara de nuestro vecino Spider-man, casi queda ridículo que se quite tanto la máscara.
En el guión se hace alusión a la responsabilidad y a las consecuencias de los actos y bla bla bla... pero no hay ni una pincelada de ironía o humor y hay tantas coincidencias que no hay quien se lo crea (que ya es decir). Además, ciertos personajes desaparecen de la trama sin motivo quedando como meras comparsas desdibujadas, creando en el espectador una sensación de improvisación o simple chapuza.


  En cuanto a los actores,  el Peter Parker encarnado por Andrew Garfield es un chaval insufrible, gesticulante y con un toque outsider del cual el original carecía completamente. Lo de que vaya en skate no me parece mal, tampoco lo de los lanza-redes me acaba de disgustar, en eso han sido fieles al cómic. El cambio del diseño del traje casi lo veo lógico aunque me quedo con el de toda la vida. Vale que Emma Stone está radiante con esa diadema y con esas minifaldas conjugadas con botas y leotardos (aquí han sido también fieles a la imagen de los cómics originales) y resulta una Gwen Stacy bastante más creíble que la encarnada por Bryce Dallas Howard en Spider-man 3. Lamentablemente, el villano de turno carece de carisma y parece de todo menos aterrador, este Lagarto interpretado por Rhys Ifans no está a la altura y de ello se resiente todo el film.


Pero todo lo mencionado anteriormente tendría perdón y lo pasaríamos por alto si el film fuera trepidante y divertido, pero no es el caso. Yo me aburrí, algo que nunca me había pasado con ninguna de las tres películas de Raimi.

 Resumiendo, se puede ver pero no supera a las anteriores, ni siquiera a la tercera entrega que era la más floja con diferencia. Supongo que su único propósito era iniciar una nueva franquicia, cosa que sí han logrado.


4

viernes, 27 de julio de 2012

El caballero oscuro: la leyenda renace (The dark knight rises)



Han pasado ocho años desde que se vio por última vez a Batman. Las tasas de criminalidad en la ciudad de Gotham han disminuido tanto que no parece que haya lugar para vengadores enmascarados. Pero una terrible amenaza se cierne sobre Gotham.

Dejemos algo claro desde el principio: la llegada de Christopher Nolan al cine de superhéroes es lo mejor que le podía haber pasado a este tipo de cine. Nolan dotó a este género de la calidad que necesitaba, dejando de ser un cine únicamente para niños y adolescentes pasando a ser un espectáculo disfrutable por los que buscaban (buscábamos) algo de contenido más allá de las explosiones y las patadas.


Si bien su primera película sobre Batman (Batman begins) no me acabó de convencer, fijaba las bases para que en futuras entregas Nolan fuera desarrollando el universo del personaje y su idea del espectáculo. El caballero oscuro fue la constatación de que otro tipo de cine palomitero era posible (algo de lo que tipos como Michael Bay parecen no haberse dado cuenta) y puso el listón muy alto (quizás demasiado). No era un film perfecto pero era todo lo que siempre habíamos soñado los aficionados al cómic: un film digno que no desvirtuara la historia original ni nos produjera vergüenza ajena (aún me acuerdo del bochorno que sentí viendo Daredevil o las penosas pelis de Joel Schumacher sobre Batman). Nolan es un director presuntuoso y grandilocuente cuando tiene un presupuesto alto a su disposición (para qué vamos a negarlo) pero entretiene dando algo más que efectos especiales. Sus películas tienen una historia y una tensión que no son habituales en el cine de entretenimiento. Nolan se ganó una merecidísima fama de cineasta de culto con films como Following o Memento antes de meterse de lleno en el cine comercial, esa fama de tipo raro le precedía y es lo que necesitaba el cine de acción.

La leyenda renace (o cómo le hayan querido llamar) es el más que correcto colofón a esta saga de Nolan sobre Batman. No está a la altura de El caballero oscuro, probablemente debido a que comete los mismos errores que Batman begins: se centra demasiado en el personaje de Bruce Wayne. Lo que realmente hace buena a una película de superhéroes no el héroe, es el villano. El Joker es mucho mejor villano (o da más juego) que Bane, El espantapájaros o Ra´s Al Ghul. Por eso este film es inferior. Quizás Joker sea el mejor villano nunca salido de un tebeo, una vez adaptado con éxito al cine, ningún otro villano estará a la altura. Ése era el principal problema de esta película. La amenaza que Bane significa es comparable o incluso mayor de la que significaba el Joker y Nolan sigue rodando magistralmente, pero la peli no está a la misma altura. En ningún momento voy a decir que el film sea malo o aburrido en ninguno de sus 164 minutos, juro por mi colección de tebeos de Batman que me lo he pasado en grande con esta película. De hecho, la considero inferior a la segunda pero bastante mejor que la primera.

Nolan nos entrega un guión quizás no tan elaborado como en la anterior entrega, los diálogos no so tan espectaculares, centrándose en el apartado visual y la pirotécnia. Quizás el film peque de querer apabullar al espectador en busca de un gran final para la saga e intente ocultar las carencias del guión entre el humo de las explosiones, no sé. Sus casi tres horas se me pasaron en un suspiro y no miré el reloj ni una sola vez, buena señal. Incluso en algún momento me quedé clavado al sillón. Entre la música de Hans Zimmer (abusando una vez más de coros y percusiones) y los bombazos tenía la sensación de que realmente estaba inmerso en una ciudad sitiada. Pero el guión repite situaciones ya vistas en las entregas anteriores, no aporta nada nuevo. Hay persecuciones a camiones, una ciudad sumida en el caos, bombas a punto de explotar y los artilugios habituales. No se aportan elementos nuevos a la saga, sólo se reiteran los a conocidos. Quizás sea pedirle demasiado.

Si me preguntan qué Catwoman prefiero entre la de Michelle Pfeiffer o la de Anne Hathaway (la de Halle Berry no cuenta) debo reconocer que en la película de Nolan el personaje está mucho más elaborado y es más creíble que en la de Tim Burton. Sí, me ha gustado esta Catwoman debido a que ni siquiera se le llama así ni tiene nada que ver con los gatos. Nolan da su particular visión de los personajes del cómic, una visión realista (en la medida de lo posible, of course) y logra que no den grima al trasladarlos a la pantalla. Otro ejemplo: siempre he odiado al personaje de Robin, me parece totalmente innecesario y una concesión al público adolescente, en los tebeos quedaba resultón pero en las patéticas películas de Joel Schumacher: Batman forever y Batman y Robin quedaba bochornoso (como casi todo en ellas). Nolan nos entrega un Robin totalmente creíble y distinto, nada que ver con ese chaval odioso en pantalón corto y antifaz de todo a cien. También creo que es un acierto el tratamiento de personajes ya habituales de la saga como el comisario Gordon o Alfred, todos ellos evolucionan y reciben el metraje necesario para ello, no sólo se enfrentan a una amenaza.

 En cuanto al reparto: Chistian Bale me sigue pareciendo un tanto frío y soso para el personaje pero los habituales veteranos Morgan Freeman, Gary Oldman y Michael Caine le acompañan perfectamente como de costumbre. Por su parte, Marion Cotillard vuelve a estar muy bien en uno de esos papeles ambiguos y misteriosos en lo que Nolan la suele utilizar.  ¿Y Tom Hardy como Bane? Hombre, con la máscara que le han puesto, al pobre sólo se le ven los ojos y la calva. No son muchos recursos interpretativos pero el tipo consigue hacerse odiar.

Resumiendo, Nolan ofrece un gran espectáculo y cierra dignamente su trilogía sobre el hombre murciélago, aunque no iguale a su antecesora. Lamentablemente, me temo que tendrá que pasar mucho tiempo para que veamos una película de superhéroes a la altura de El caballero oscuro.

7

domingo, 6 de mayo de 2012

Los vengadores (The avengers)



Para que luego digan que comento películas muy raras que no conoce nadie. Hoy toca hablar de Los vengadores. Los vengadores te da justo lo que promete, ni más ni menos. Si no te gustan las películas de superhéroes de la Marvel, pues no le verás la gracia. Si te criaste leyendo los cómics de Los vengadores (como es mi caso) probablemente saldrás encantado. Incluso opino que los no iniciados en los cómics pueden salir más que contentos si no le exigen nada a la película.

Los vengadores es puro entretenimiento pirotécnico a base de efectos especiales, es cierto, pero lo mejor de la peli (lo que la separa de basuras tipo Transformers o G.I Joe) es que consigue que cada personaje mantenga su propia personalidad (ya presentada en película anteriores) logrando que los piques entre los héroes sea lo más destacado del film. A parte de espectaculares efectos especiales y alucinantes escenas de acción como la de el ataque al portaaviones volante o la batalla final en la destrozan medio Nueva York, esta película consigue entretener a base mezclar con cierta habilidad a personajes tan opuestos que las chispas saltan inevitablemente. Más que el enfrentamiento con los villanos, en mi retina se quedaron las peleas entre Thor y Hulk o entre Iron Man y El capitán América. Por cierto, me gustaron mucho las referencias al traje desfasado y hortera del Capitán. Es esa ironía y esa auto parodia lo que salva de la quema a esta serie de películas sobre personajes Marvel. No procede ponernos puristas con el guión (una chorrada bastante grande que no hay por donde cogerla) ni debemos pedirle fidelidad a unos cómics que empezaron a publicarse en 1963. Pero sí hemos de agradecerle ciertos golpes de humor y que no trate al espectador adulto de idiota.



El director Joss Whedon (Serenity, Buffy la cazavampiros) se limita a narrar lo que pone en el guión y a cumplir con su función de asalariado. Al menos consigue que las peleas se entiendan y no marea al espectador. No es esta una película de autor, es una película de estudio dedicada a gustar al mayor número posible de espectadores. Visto lo visto, el objetivo se ha cumplido, los niños que había en  la sala se lo pasaron en grande y yo salí con la cabeza y los oídos aturdidos pero satisfecho. Tenía mucho miedo a esta película pero creo que la esencia de los personajes se ha respetado y el espectáculo es más que digno.

¿Los actores? Pues están correctitos en sus papeles, me sigue gustanto mucho el irónico y macarra Tony Stark de Robert Downey Jr (impagable esa camiseta de Black Sabbath) y a Scarlett Johansson le siguen quedando muy bien las mallas negras. Yo hubiera optado por unos trajes femeninos más escuetos o menos resistentes a los fragores de la batalla, pero es una opinión personal. Del resto del reparto me quedo con Tom Hiddleston y su Loki manchando de baba el cristal que le separa de la Viuda negra. A destacar el inevitable cameo de Stan Lee (que para algo es el creador de todo este tinglado) y la divertida aparición de Harry Dean Stanton.

 Los Vengadores es un film palomitero casi perfecto para pasar al rato y que dejará más que satisfechos a los aficionados al cómic.


P.S.1 : ¿Habrá Los Vengadores 2? Me apuesto mi colección de tebeos de Los vengadores de ediciones Fórum a que sí. Por cierto, no os levantéis de asiento nada más empezar los títulos finales, como viene siendo habitual, os espera una sorpresa.

P.S. 2: Pero qué ojo tienen los de Marvel que hasta han incluido un temazo nuevo de Soundgarden (uno de mis grupos favoritos de los 90) tras 15 años de inactividad discográfica. Otro punto más a favor de esta peli.

lunes, 2 de abril de 2012

The walking dead, segunda temporada



Ya visionada la segunda temporada de The walking dead, creo que merece un comentario. Ha sido una temporada irregular pero, si la primera temporada fue perdiendo fuelle a marchas forzadas, esta segunda ha ido ganando enteros poco a poco.

 El recorte de presupuesto y el despido de Frank Darabont no se han notado demasiado, la verdad, han sido más nocivos el parón tras el séptimo episodio o el exasperante ritmo de la serie en algunos momentos. Los acontecimientos se han ido retardando y algunos se han hecho esperar demasiado. Valga como ejemplo la interminable búsqueda de Sophia o los continuos piques entre Rick y Shane. La trama ha avanzado a trompicones y dejando a varios personajes descolgados (T-Dog o algunos miembros de la familia de Hershel apenas han dicho una palabra en toda la temporada). Ha habido grandes momentos que elevan a la serie por encima de la media (el final del séptimo episodio), pero otras veces el tedio ha hecho acto de presencia peligrosamente. Por suerte, los 2 últimos episodios han sido de infarto y compensan con creces.

El final de esta segunda temporada plantea muchas más preguntas que repuestas, ya salieron de la granja de Hershel (que ya iba siendo hora) pero muy debilitados y sin un lugar en el que guarecerse (aunque el plano final fue premonitorio). Además las cosas se ponen feas para la cohesión interna del grupo, Rick confiesa lo que el científico le dijo al oído al final de la primera temporada (se veía venir) lo que provoca un aluvión de críticas que hacen que Rick pierda la paciencia y dé por finiquitada la democracia dentro del grupo. También nos presentan brevemente y de manera espectacular al personaje de Michonne (esta chica nos puede dar muchas alegrías). No sé, los últimos episodios estuvieron bien, pero el remate de la serie lo vi un poco decepcionante. Yo esperaba algo más fuerte o que respondieran a  algunas preguntas en vez de crear nuevas incertidumbres. Pero claro, así no habría material para varias temporadas.


Pero me ha gustado, a pesar de sus palpables limitaciones, la serie me sigue atrapando. Podría ser más violenta y más rápida, es cierto, y la cosa mejora mucho cuando coge carrerilla pero sigue siendo divertida. La tercera temporada está más que asegurada ¿Tendrán el valor suficiente como para plasmar fielmente todo lo que ocurre en el cómic? Lo dudo.


De regalo os dejo las 6 páginas que se publicaron en Playboy contando el origen de Michonne y de sus dos acompañantes.





domingo, 1 de abril de 2012

Ghost Rider: Espíritu de Venganza


Hubo una vez un joven muchacho llamado Nicolas Coppola que soñaba con llegar a ser un gran actor. Ayudado por su tío, un tal Francis Ford Coppola y con el apellido artístico de su héroe de cómic favorito (Luke Cage), el muchacho obtuvo sus primeros papeles. Poco a poco el muchacho se fue haciendo un hueco y llegó a ser un actor reconocido y con bastante prestigio gracias a películas como Cotton club, La ley de la calle, Birdy, Arizona Baby o Corazón salvaje. Incluso ganó (o le regalaron) un Oscar por Leaving Las Vegas (1995). Ahí fue cuando su carrera dio un giro inesperado.

 El bueno de Nicolas se pasó al cine de acción y aventuras más palomitero participando en películas tan nefastas como La roca, Con air, Cara acara o 60 segundos y se olvidó de interpretar (estaba en todo su derecho, of course). Desde entonces no ha parado de trabajar, estrenando varias películas cada año. Creo que ha llegado hace años a un punto en el que ni él mismo se toma en serio su carrera y ha acabado auto parodiándose. Parece aceptar cualquier papel que le aporte un buen cheque. Intentó recuperar algo del prestigio perdido con papeles más arriesgados como El señor de la guerra o Adaptation (El ladrón de orquídeas) pero sus problemas financieros (¿En qué se habrá gastado tantos millones?) le hicieron desistir de seguir por ese camino. Sus últimas interpretaciones en films como Señales del futuro, Furia ciega o En tiempo de brujas son realmente bochornosas. Valga como ejemplo que este año ha recibido 6 nominaciones a los premios Razzies (3 como peor actor y 3 como peor pareja) ¿Se puede caer más bajo?



Y en esas estamos, Nicolas Cage fue una vez un buen actor que lleva 15 años haciendo basura. Así llegamos a uno de los puntos más bajos de su carrera: El motorista fantasma, Ghost rider. Yo era fan del cómic cuando era crío, pero el film no tenía nada de la mala leche y la incorrección moral del personaje. La peli era muy mala, la verdad, yo sólo recuerdo lo pasado de vueltas que estaba Cage en todo el film (el día que pongan un control anti doping en la puerta de un rodaje será el día en el Nico deje de actuar). Era casi una comedia involuntaria, la gesticulación de Cage y sus poses me hicieron reír varias veces. Lo más destacado de su interpretación era el peluquín y que aprendió a fruncir el ceño y a morderse los carrillos para parecer un tipo duro. Bueno, también recuerdo a Eva Mendes en un ajustado traje blanco. El resto del film era para olvidar.


Ahora nos llega la segunda parte, Ghost rider: Espíritu de venganza. La verdad es que está bastante mejor que la primera, sin llegar al aprobado. Me ha gustado el hecho de trasladar la acción al este de Europa y los bellos paisajes de la Capadocia (Turquía). También es un film más macarra que el primero, más irónico (muy bueno lo de las descargas ilegales) y mucho más cercano al espíritu del cómic original. La forma vertiginosa de rodar de los destalentados de Neveldine y Taylor (los irresponsables de Crank y Gamer) se adapta bastante bien al personaje. Más que hacer una franquicia palomitera como en la primera parte, han intentado hacer un homenaje ruidoso y explosivo al cómic. Objetivo cumplido. Hay buenas escenas de acción rodadas de forma vertiginosa y se aparta bastante del standard de inocuo film palomitero para toda la familia.

Pero... una vez más, el guión no tiene ni pies ni cabeza. ¿A estas alturas aún seguimos con profecías y anticristos? ¿Ritos satánicos y sacrificios? Por Dios, qué original. Al menos satán tiene la cara de Ciarán Hinds (todo un acierto) y la guapa Violante Plácido pone su puntito sexy (sin pasarse) a la historia. ¿Y Nicolas Cage? Pues está pasadísimo, fatal, pero esta vez está incluso más desatado que de costumbre. Sus gestos y sus poses impostadas hacen que el visionado de esta peli sea más divertido que lo que el guión ofrece. Ese irrisorio peinado que le han puesto tampoco ayuda mucho, la verdad, cada día se pare más a Tim Burton. Esta vez se le olvidó lo de fruncir el ceño y morderse los carrillos. El film gana muchos enteros cuando le borran la cara digitalmente y ponen la calavera en llamas. También sale otro tipo candidato al premio a peor actor de la historia, un olvidado (por suerte) Christopher Lambert. Tranquilos, sale poco.

 No sé, yo me hubiera currado más el guión y lo hubiera hecho mucho más macarra, otra vez será. 

4   

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Las aventuras de Tintin: El secreto del unicornio


Cuenta Steven Spielberg que descubrió los cómics de Tintin en 1981, cuando leyó una crítica de En busca de el arca perdida en la que se decía que Indiana Jones era una versión americana de Tintín. Spielberg se quedó perplejo y decidió leer los cómics de Tintin. Le gustaron mucho y decidió ponerse en contacto con Hergé pensando en una posible adaptación cinematográfica. Hergé se mostró encantado con la idea y expresó su opinión de que Spielberg era el único capaz de adaptar Tintín a la gran pantalla de forma satisfactoria. Lamentablemente, Hergé murió poco después y el proyecto cayó en el olvido. Hasta ahora.


Han tenido que pasar 30 años para que Spielberg adaptara finalmente las aventuras del reportero más famoso del cómic europeo. La espera ha valido la pena. El secreto de unicornio nos devuelve al rey midas de Hollywood en plena forma, el Spielberg del mejor cine de aventuras de las últimas décadas. Lo que Spielberg mejor sabe hacer. El film es todo un torbellino de ritmo y acción perfectamente sincronizados. Un disfrute para el espectador de cualquier edad. Desde los títulos de crédito el espectador se sumerge en el mundo de Tintín y se olvida de todo lo demás.
El guión es ágil y divertido, alternando aventura y humor de forma magistral. Por el film vemos a casi todos los personajes del cómic (yo eché de menos al profesor Tornasol). Es cierto que el guión no sigue fielmente ningún libro de Hergé sino que combina elementos de varios, pero la esencia de los personajes sigue intacta. Milú y el capitán Haddock son los que realmente llevan el peso de la película, aunque Hernández y Fernández aportan también buenos momentos de hilaridad.
Técnicamente se nota la mano de Peter Jackson en la producción, sus animaciones están a la altura de King Kong o la trilogía de El señor de los anillos, pura magia para soñar. Desde luego, la unión de Spielberg con Peter Jackson me parece mucho más natural e interesante que la unión con el nefasto Michael Bay. El film contiene un buen puñado de escenas antológicas como la del camarote de los marineros, el abordaje, el hidroavión o la persecución en moto. Escenas que nos recuerdan ineludiblemente a la saga de Indiana Jones tanto en su planificación como por su efectividad. Puro cine de aventuras para toda la familia.

Yo recomiendo ver esta película en 3D, es de las veces que más y mejor se disfruta de las dichosas gafas. Tanto los reflejos en los cristales, los brillos del polvo flotando en el aire o las gotas de agua logran un efecto alucinante. Desde Avatar no había visto yo un film en el que el 3D estuviera tan logrado.
Una gran aventura.
7,5

sábado, 6 de agosto de 2011

Capitán América: El primer vengador (Captain America: The First Avenger)


Nacido en 1941 de la mano de Joe Simon y Jack Kirby y con una clara función propagandística, El capitán América ha logrado sobrevivir durante 70 años defendiendo la libertad made in America. No hay más que ver su traje para darse cuenta del innegable mensaje propagandístico del personaje.


La verdad es que en la Segunda Guerra Mundial las cosas estaban bastante claras en cuanto a quienes eran los malos, en décadas posteriores la cosa no estuvo tan fácil y el Capitán América no fue a Corea (estaba congelado) o Vietnam, aunque creo que sí se ha enfrentado a Al Queda.

El film que nos ocupa es un intento de rememorar los films clásicos de aventuras de los años 40, esos que protagonizaba el capitán América. Es un ameno film de aventuras con un correcto guión y un buen ritmo. No aporta nada nuevo que no esté más visto que el tebeo, pero no aburre en ningún momento ni trata al espectador de idiota. Sigiendo los pasos de X-men, Iron man o Thor, los de Marvel nos entregan una decente adaptación de su personaje. La formula no es perfecta pero da a los fans lo que pide y es capaz de enganchar a las nuevas generaciones. Esta vez tiene el aliciente de ambientar el film en la segunda guerra mundial, lo que le da un toque retro no sólo en la estética.

Se agradece que hayan cuidado bastante el guión con constantes guiños al universo marvel: el padre de Tony Stark, el cubo cósmico, etc. Incluso se ríe con ironía del ridículo traje de El Capitán América y su labor propagandística. En un momento dado hasta se le llama "payaso con escudo". Aún así, uno no puede evitar sentir cierta vengüenza ajena en la inevitable escena de las masas vitoreando al héroe que tanto les gusta a los de Hollywood.

No podemos obviar que un superhéroe vestido de esa guisa puede quedar realmente irrisorio en pantalla pero, al igual que en Thor o Spider-man, han sabido resolver el problema evitando caer en un ridículo que hubiera arruinado el film. Es que un héroe con alitas en la cabeza queda muy mal en pantalla. Por cierto, me gustó cómo introducen lo del escudo haciendo que Steve Rogers se proteja previamente con la tapa de un contenedor de basura o la puerta de un taxi.

El director Joe Johston (Oceanos de fuego, Jumanji, Parque jurásico 3) demuestra una vez más que es un hábil narrador de películas de aventuras y entrega un film entretenido.Creo que el tono elegido por Johnston es muy acertado, sabe que el personaje no debe ser tomado en serio y entrega un buen film de aventuras para pasar el rato, sin más aspiraciones y evitando los excesos patrióticos en todo lo posible (la cosa estaba difícil). Un blockbuster veraniego bastante correcto.
Esta peli en manos de Michael Bay huiera sido terrible. Básicamente la diferencia entreTransformers 3 y El capitán América es que la segunda no está rodada como un video clip, hay una historia que contar, un cierto desarrollo de los personajes, no abusa de los planos de la bandera y las batallas no se hacen eternas.

Supongo que buena parte del éxito del film están en las convincentes interpretaciones de todo el elenco. Chris Evans está correcto en el papel de Steve Rogers tanto antes como después de tomar el suero del super soldado. Por cierto, ¿este chico no hizo ya de La antorcha humana? Dos héroes Marvel interpretados por el mismo actor, curioso. Hugo Weaving está bien, me gusta en este tipo de papeles de tipos raritos tipo Matrix o V de vendetta. También se puede decir que Tommy Lee Jones cumple y da credibilidad a su personaje. Yo me quedo con Hayley Atwell (Los pilares de la tierra, El sueño de Casandra) que parece que por fin va a tener el reconocimiento que se merece.

Hay cosas que no me acaban de gustar, como que Cráneo rojo no lleve máscara sino que su propia cara sea de color rojo o la muerte de ciertos personajes que no coincide exactamente con los cómics. En mi opinión, son licencias sin demasiada importancia. Como los famosos lanza redes de Spider-man, variaciones que no traicionan la esencia del personaje.

Lo dicho, una peli entretenida que prepara el terreno para Los vengadores. Habrá que ver cómo queda el personaje en el presente.

5,5


viernes, 27 de mayo de 2011

Españistán: Este país se va a la mierda


No tiene el rigor de Inside Job pero este vídeo sobre la crisis económica dice unas cuantas verdades como puños. El vídeo es la presentación del cómic Españistán de Aleix Saló. Muy recomendable.




jueves, 5 de mayo de 2011

THOR


Cuando me enfrento a una adaptación de los cómics que leí de pequeño, siempre voy con miedo. Por una vez, parece que las cosas se han hecho con bastante gusto. Los de Marvel se están trabajando sus adaptaciones cinematográficas para convertirlas en blockbusters bastante amenos, puede que sean films vacíos cuyo único fin sea entretener, pero los comics de Marvel nunca han pretendido otra cosa (afortunadamente).



Thor podría parecer a priori el film que todo el mundo ha hecho por encargo. No me creo que Kenneth Branagh tuviera en mente dirigir un film tan comercial si no media un buen cheque. Tampoco me creo que Natalie Portman pensara que esta peli le iba a reportar otro Oscar tras El cisne negro o Anthony Hopkins pensara que el personaje de Odín le iba a reportar grandes laureles (la verdad es que el tipo es el actor ideal para este personaje).
Thor es una peli de encargo, una peli de los Estudios Marvel. Y se nota (como en muchos otros blockbusters). Pero también se nota cierto respeto y cuidado con el que han tratado todo el universo del personaje. Se han modificado algunas cosas, era de esperar, pero la esencia del personaje se ha trasladado muy fielmente a la pantalla. Vale que Thor no se transforma en el doctor Donald Blake pero no creo que sea una modificación tan sustancial (adaptar 50 años de historias en hora y media es imposible), al menos se hace un ingenioso guiño al personaje. También es muy de agradecer que no caiga en el ridículo.
Kenneth Branagh dirige con probada maestría y soltura esta ligera historia bastante alejada de los dramas de Shakespeare que le dieron fama. Thor tiene algo de drama de Shakespeare pero no tiene nada que ver con Enrique V o Hamlet. Es en los palacios de Asgard cuando el film mejor funciona, a Brannagh se le dan mejor las intrigas palaciegas que las tramas de ciencia ficción. El film tiene en su primera hora un ritmo muy acertado y momentos bastante divertidos. Thor funciona como entretenimiento durante casi todo el metraje aunque hay cosas que no acaban de encajar y al final peca un poco de previsible. Al menos, nunca trata al espectador de idiota. Branagh sabe que sólo es cine comercial y decide darnos un producto digno dentro de sus limitaciones.

En cuanto a los actores, Chris Hemsworth tiene el físico perfecto para interpretar a un dios nórdico (vamos, que está cuadrado) e incluso resulta bastante creíble. Lo de la química con Natalie Portman no está muy logrado pero creo que se debe a que sus diálogos en el guión son lo más flojo del film. No resulta creíble su relación ni el profundo cambio que se produce en Thor al conocer a Jane. El dios del trueno pasa de ser un chulito bravucón a un alma caritativa en apenas 1 día gracias a cuatro escenas con la Portman, eso sí es magia. Tampoco Kat Dennings o Stellan Skarsgard pueden hacer mucho con sus planos personajes, la primera es el contrapunto cómico y el segundo es el toque nórdico. El que más me gustó fue Tom Hiddleston en la piel del dios del engaño, Loki. Me parece lo mejor de la película.

No falta el inevitable y divertido cameo de Stan Lee ni las referencias a los otros vengadores: se menciona a Tony Stark, se hace referencia a Bruce Banner y aparece Ojo de halcón en la piel de Jeremy Renner (The town, En tierra hostil). Así pues, Marvel va tejiendo el entramado de Los Vengadores cuyo rodaje ya ha empezado y cuya fecha de estreno está fijada para el verano de 2012. Incluso se avisa al final de la peli que Thor regresará en dicha película. Pero antes tendremos que ver este año la peli de El Capitán américa: El primer vengador. Miedo me da ver tantas barras y estrellas en una pantalla, puede ser un espectáculo patriotero demasiado indigesto.

Para terminar con Thor, debo señalar que todo el trabajo de vestuario me parece genial: era muy difícil que los cascos con plumas o cuernos no quedaran ridículos en pantalla. Por suerte, han prescindido de estos elementos en la mayoría de las escenas. Tanto los decorados como los efectos especiales son espectaculares y todo un regalo para el espectador que sólo busque pasárselo bien.

Los aficionados al personaje creo que saldrán satisfechos con el tratamiento que se ha hecho de Asgard, Odín, Loki y todos los elementos de los dioses nórdicos. Los no iniciados en el tema pasarán un buen rato, sin más.

5,5